La zona fronteriza donde fueron encontrados 19 cuerpos calcinados de posibles migrantes centroamericanos el fin de semana pasado cerca del poblado de Santa Anita en el municipio de Camargo en Tamaulipas, se ha convertido en los últimos meses en el epicentro del tráfico ilegal de indocumentados a Estados Unidos y es, hoy por hoy, el punto por donde más migrantes tratan de ingresar de manera clandestina a la Unión Americana.
Se trata del sector de Rio Grande Valley, que de acuerdo con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) tiene una extensión de poco más de mil kilómetros. En los últimos seis meses, el gobierno estadunidense ha descubierto y desmantelado una treintena de casas de seguridad de bandas de polleros y tan solo en lo que va del año fiscal 2021, registra una cuarta parte del total del número de detenciones de migrantes indocumentados en toda la franja limítrofe, es decir, un 25 por ciento de los 207 mil 968 detenidos hasta ahora.
Tres distintos incidentes en la última semana dan una idea de la intensidad del flujo migratorio en la región. Menos de 50 kilómetros separan al punto donde fueron encontrados los 19 cuerpos calcinados en Tamaulipas de dos casas de seguridad utilizadas por polleros en Texas donde el martes la Patrulla Fronteriza detuvo a 100 migrantes hacinados.
Dichas casas fueron encontradas el martes por agentes de CBP y se detuvo a hombres, mujeres y niños por igual, provenientes de lugares como Guatemala, Honduras, Nicaragua, Ecuador, y México.
El primer escondite fue encontrado el martes, horas después de que se registrara el incidente en Camargo. Los agentes estadunidenses recibieron información de una posible casa de seguridad ubicada en Roma, una pequeña ciudad en Texas, muy cerca de la frontera a tan sólo 43.9 kilómetros del lugar donde se hallaron los cuerpos calcinados en Tamaulipas. El viaje en automóvil entre las dos ciudades se estima en hora y media de camino.
Al llegar a la primera casa de seguridad, los agentes de la Patrulla Fronteriza observaron a un grupo de migrantes que intentaban escapar, por lo que dio inicio una breve persecución. En el lugar, detuvieron a un total de 59 personas tanto al interior de la casa de seguridad como en los alrededores.
Uno de los migrantes que intentó fugarse, sufrió una lesión en el tobillo después de saltar una cerca durante la persecución. El herido requirió atención médica y fue ingresado en un hospital local para recibir el tratamiento correspondiente. Una vez en el hospital se supo que, además, está infectado de covid-19.
Más tarde, la oficina del Sheriff del Condado de Hidalgo llamó a la estación de la Patrulla Fronteriza de Weslaco, también en Texas, y solicitó ayuda por una posible casa de seguridad en el pequeño poblado de Donna. Habían recibido una llamada al 911 de alguien dentro de la segunda casa de seguridad. En el lugar se detuvieron a un total de 41 migrantes que entraron ilegalmente a Estados Unidos.
El problema de migración ilegal en el sector de Rio Grande Valley es de tal magnitud, que de acuerdo con datos del CBP, tan sólo en los últimos 6 meses 34 casas de seguridad han sido descubiertas en la zona.
El sector Rio Grande Valley tiene nueve estaciones, dos puestos de control, desde donde se coordinan operaciones aéreas y marítimas además de una oficina de inteligencia. Los agentes de la Patrulla Fronteriza en la zona tienen a su cargo más de 515 kilómetros de frontera compartida con Tamaulipas que corre paralela al Río Bravo, 402 kilómetros de frontera marítima con salida al Golfo de México y 19 condados que equivalen a más de 27 mil kilómetros cuadrados.
De acuerdo con información de inteligencia desclasificada por la DEA (Administración para el Control de Drogas, por sus siglas en inglés), la zona de Rio Grande Valley también es una de las zonas donde se registra el mayor tráfico de estupefacientes por parte de los cárteles mexicanos, especialmente cocaína.
Según la Evaluación Nacional de Amenazas de Drogas 2019 de la agencia, es el cártel del Golfo el grupo criminal que predomina en dicho sector. Aunque se trata de un municipio dedicado principalmente a la agricultura y ganadería, su amplia extensión rural y de brechas, es motivo de disputas entre los grupos criminales para realizar actividades ilícitas como el trasiego de drogas y migrantes.
Este martes 26 de enero, Tamaulipas y Texas, acordaron la continuidad de la campaña “Se Busca”, identificando a 10 criminales trasnacionales, que operan en ambos lados de la frontera.
En la lista, se encuentra Agustín Ordorica López, miembro activo del cártel del Noreste, quien opera las actividades de ese grupo en los poblados de Nuevo León y los que colindan en Tamaulipas, como Camargo, Miguel Alemán y Díaz Ordaz.
El cártel del Noreste, extiende sus operaciones desde Nuevo Laredo, donde se ubica a Juan Gerardo Treviño-Chávez, El Huevo, líder de la organización criminal.
En el municipio de Camargo, se ubican los hermanos César Morfín Morfín, Primito y Álvaro Noé Morfín Morfín, R8; ellos operan para el cártel del Golfo y a Primito, desde Jalisco o Michoacán, donde se presume entabló una alianza con el cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y algunos “delincuentes de ese cártel, han llegado a apoyar al cártel, en Tamaulipas.
ledz