Con casi nueve meses de embarazo, Arantxa Piñeyro, vecina de la colonia Lomas del Valle, en San Pedro Garza García, llevaba confinada un año dos meses en casa por la pandemia del covid-19.
Este jueves, la joven madre rompió el encierro para acudir junto con otras mujeres embarazadas, que se mezclaban con mayores de 50 años y adultos mayores, a un módulo de vacunación contra el covid-19 en Santa Catarina, Nuevo León.
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Unas más jóvenes que otras esperaban su turno para que abriera el centro de inmunización contra el coronavirus, dividido en 8 módulos para aplicar la vacuna de los laboratorios Pfizer-BioNtech en la Preparatoria No. 23 de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
"Mucha emoción y felicidad al recibir la inmunidad, digo, esperemos, no ( lo esperaba) digo, pensé que no iba a llegar tan temprano y tampoco pensé que a las embarazada les iban a dar prioridad, creí que (me vacunarían) por la edad o hasta que me tocara, ahorita tengo 33 semanas, hay que seguirse cuidando, obviamente que se siente un poquito más de seguridad, y la segunda dosis nos dijeron que será de 21 a 28 días.
"Desde marzo del año pasado que estaba en casa sin salir y más por el embarazo, obviamente un doble cuidado, estoy un poquito más tranquila, hay cuidarse porque aparte tengo otra niña", dijo Arantxa.
Paola Cuéllar, de 20 años, y con ocho meses de embarazo, también aseguró que con la vacuna se siente más tranquila.
"Muy bien, me siento con más tranquilidad de evitar que me enferme y más que nada esperar la segunda dosis. Nos la pasábamos esperando porque no podía entrar a ninguna parte, con temor y no se podía hacer ninguna actividad, tampoco se podía entrar a centros comerciales, sí estuve encerrada.
"Pues con la vacuna recibes los anticuerpos muertos, es muy importante que se vacunen para protegerse y proteger a su bebé y si pueden y tienen la oportunidad", recomendó la vecina que desde hace dos años reside en Santa Catarina.
Por su parte, José Luis Doria Mata, secretario de Servicios Primarios, informó que para este jueves se contaba con 3 mil 800 dosis en ese módulo de la prepa de la UANL, aunque esperaban unas 400 a 500.
"Cualquier persona puede venir a vacunarse cumpliendo con los requisitos, pero en el caso de la embarazadas no hay manera de comprobarlo, se aboga a la buena fe de las señoras, se les atiende y punto, pero la Secretaría del Bienestar es el que decide, es la que está al frente y ponen el filtro", indicó el funcionario.