El hombre que fue asesinado a balazos la noche del jueves en la colonia Las Estancias, en Apodaca, Nuevo León, era un menor inocente de tan solo 14 años, completamente ajeno a los hechos.
En ese mismo lugar resultó herido otro joven, supuesto objetivo de los agresores, y quien habría utilizado al adolescente como escudo para protegerse de las balas.
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Al momento del ataque, la víctima mortal se desempeñaba en la venta de frutas y verduras junto a su familia, en un puesto ambulante, fue ahí donde llegó el sujeto al que los delincuentes buscaban atacar.
El hecho ocurrió antes de las 23:00 horas, en las avenidas O Primera y Nuevas Puentes, en la colonia Residencial Las Estancias.
El pequeño Roberto, quien habitaba en el mencionado sector, recibió disparos en la cara, en el pecho y el abdomen, así como en la espalda y en la mano derecha.
El sujeto que se cubrió con él, Ángel Ricardo, de 27 años, resultó con heridas en la espalda y en las piernas, por lo que fue trasladado a un hospital de Monterrey.
En un afán de salvarle la vida al menor, la familia lo subió a la caja de una camioneta y lo llevó a un centro médico ubicado en una plaza comercial de Sendero y Privada de Anáhuac, en los límites de San Nicolás y Escobedo, pero estaba cerrado, y la víctima falleció en el sitio.
De las indagatorias se desprendió que el herido, Ángel Ricardo, cuenta con antecedentes por narcomenudeo, pues fue detenido durante el presente año.