Dos jóvenes identificados como Juan Daniel “N” y Valentino “N”, éste último originario del estado de Guerrero, ambos probables miembros de la organización criminal conocida como La Familia Michoacana, fueron vinculados a proceso por el delito de extorsión en agravio de un comerciante de la Central de Abasto de Toluca.
La víctima decidió no regresar a comercializar en la capital mexiquense, pero continuaron las amenazas en el municipio de Jiquipilco. Los probables responsables pasarán dicho proceso tras las rejas en un penal de la zona norte de la entidad mexiquense.
De acuerdo con la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, en agosto de 2020 un comerciante de la Central de Abasto de Toluca comenzó a recibir mensajes escritos a nombre de La Familia Michoacana donde le exigían una cuota de dinero a cambio de dejarlo trabajar.
Llamadas intimidantes
La víctima hizo caso omiso a estas primeras advertencias y en el mes de septiembre de ese mismo año recibió llamadas telefónicas de hombres que se ostentaron como integrantes del grupo criminal antes mencionado, los cuales le exigieron dinero a cambio de no hacerle daño.
Ante las constantes amenazas, el comerciante dejó de acudir vender sus productos a la Central de Abasto de Toluca y se regresó a su natal Jiquipilco donde continuó trabajando; sin embargo, en junio de este año regresaron los extorsionadores a exigirle dinero, por lo que accedió y entregó cuotas en diversas ocasiones.
Detención en flagrancia
El pasado 4 de octubre, dos jóvenes se presentaron en el domicilio de la víctima para exigir más dinero y después pretendieron huir a bordo de dos vehículos, pero fueron interceptados y detenidos por elementos de la Secretaría de Seguridad del Estado de México, por lo que fueron presentados ante el Ministerio Público, donde se integró la carpeta de investigación por el delito de extorsión.
Tras analizar los elementos de prueba aportados por el MP, la autoridad judicial determinó vincular a proceso a Juan Daniel “N”, de 22 años, y Valentino “N”, de 21, con un plazo de dos mes para el cierre de investigación complementaria, tiempo en el que permanecerán tras las rejas en el Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Ixtlahuaca.
KVS