Dedicado a Abimael Salas
¿Cómo llegó Abimael Salas a los Telediarios?
“…Todo comenzó en febrero de 1991, cuando fui invitado por el maestro Miguel Ángel Vidal para trabajar como asistente de meteorólogo. Desde entonces el área de Noticias y Meteorología ha crecido de forma exponencial. En aquel año, el Telediario Nocturno duraba solo 30 minutos con una sola sección del pronóstico del tiempo”.
En el libro 45 años, 45 historias, Abimael escribe:
“…Pero el evento meteorológico más relevante que me ha tocado pronosticar es la llegada del huracán Alex a Nuevo León, y la devastación que generó en toda la región. El movimiento errático y lento por Nuevo León, Tamaulipas y Coahuila, y su paso a través de la Sierra Madre Oriental, generó intensas precipitaciones, solo superadas por los dos ciclones que provocaron la gran inundación de 1909”.
Para cubrir la llegada de Alex fueron más de tres días consecutivos de labores del personal de Multimedios entre charcos, ropa mojada y una ciudad arrasada. ¿Cómo olvidar la incertidumbre expresada al aire por el aumento del caudal del río Santa Catarina y no tener noticias del comportamiento de la presa Rompepicos, aguas arriba en La Huasteca, que al final cumplió con su objetivo de reducir el cauce.
Nos queda el recuerdo de la magnitud de los daños provocados por los deslaves e inundaciones, y cómo alteraron la ciudad.
Gilberto: cuando la TV se enlaza con la radio
Es común que la radio se enlace a la televisión en algunos programas especiales. En el caso de la cobertura que hizo el entonces Canal 12 de Monterrey al paso del huracán Gilberto los días 16, 17 y 18 de septiembre de 1988 fue al revés: la televisión se enlazó a La Gran AW 1280, de Multimedios.
La unidad móvil de televisión que teníamos en esa época se encontraba desmantelada y bajo reparación, por eso en esa cobertura informativa la televisión se enlazó a radio.
La transmisión duró 25 horas y 15 minutos con un solo equipo de conductores: José de la Luz Lozano, Armando Garza Cortez, Antonio Córdova, María Elena Meza y Javier Lozano, entre otros compañeros.
Allen y una frontera devastada
Todo empezó el sábado 9 de agosto de 1980. Los cables que llegaban a la redacción del Canal 12 daban cuenta del arribo en las próximas horas del huracán Allen, que traía vientos de hasta 200 kilómetros por hora.
Junto con Daniel Posada Chávez y el camarógrafo Manuel Pachicano decidimos trasladarnos a Reynosa, Tamaulipas, ciudad a la que llegamos después de mil peripecias y pegados a un autobús que cubría la ruta Monterrey–Cadereyta–Reynosa, que nos iba abriendo paso entre las calles y avenidas inundadas de la ciudad tamulipeca, y guiándonos, ya que la lluvia no nos permitía saber en qué lugar estábamos.
Decidimos buscar un refugio y lo encontramos en la Cruz Roja de Reynosa, lugar donde pasamos la noche monitoreando la radio local y de Harlingen, Texas, que ubicaban el ojo de Allen a punto de entrar en un lugar localizado entre la Isla del Padre y del puerto Aransas.
Al día siguiente (domingo) decidimos trasladarnos a Matamoros para filmar los daños de la entrada del huracán y entrevistar a los damnificados. Filmaron todo y entrevistamos, entre otros, al alcalde de Matamoros, quien nos dio un balance tentativo de los daños ocasionados.
Después del mediodía cruzamos la frontera con Brownsville, Texas, y nos dirigimos a la Isla del Padre y puerto Aransas. El panorama era aterrador: embarcaciones incrustadas en los techos de las casas cercanas a la playa, palmeras vencidas por el viento y otras casi desaparecidas; edificios de varios pisos con cristales rotos o arrancados por los vientos que llegaron a alcanzar más de 200 kilómetros por hora, según nos dijeron las autoridades.
Con ese material grabado y filmaciones que intercambiamos con nuestros colegas de la televisión de Harlingen, regresamos a Monterrey para transmitir el reportaje del huracán Allen en los Telediarios del Canal 12 y el programa Media Semana. En ese horario de las 10 de la noche, una semana después se inició el miércoles el programa Ayuda, que duró 40 años al aire.