El monto de los créditos fiscales asciende actualmente a 747 mil 177 millones de pesos, pero 81 mil 762 millones de pesos del total son considerados “de baja probabilidad de cobro”, lo que representa un severo daño al erario público.
Así lo afirmó el presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, Alfonso Ramírez Cuéllar, y detalló que más de 186 mil millones de los adeudos al Servicio de Administración Tributaria (SAT) corresponden a grandes contribuyentes y representan casi 25 por ciento del volumen total.
“Es urgente implementar medidas que eviten que esos créditos pasen a formar parte de los considerados de baja probabilidad de cobro”, remarcó el legislador de Morena.
Ramírez Cuéllar instó por ello al SAT a ampliar la información sobre los créditos prácticamente irrecuperables, es decir, aquellos que la administración tributaria ha determinado a cargo de deudores insolventes, no localizados y en comprobación de incobrabilidad.
Sostuvo que el sistema tributario presenta todavía deficiencias que son aprovechadas por los grandes contribuyentes y sus despachos fiscales para aplazar el mayor tiempo posible el pago de impuestos y obtener así importantes beneficios e incluso evitar el pago.
El diputado federal insistió en la necesidad de avanzar en la ruta de una política tributaria para asegurar que todos los contribuyentes paguen lo justo.
Recordó que la comisión legislativa a su cargo convocará a una serie de foros para discutir y buscar los consensos sobre las reformas que permitan recuperar esos créditos fiscales, así como acciones preventivas que impidan continuar con el daño al fisco.
“Los 81 mil 762 millones de pesos considerados en los créditos de baja probabilidad de cobro representan el 0.9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y son recursos públicos que debieran ser captados y dirigidos hacia los servicios y necesidades más urgentes de la población”, remarcó.
En ese contexto, Ramírez Cuéllar llamó a sumar esfuerzos para generar mecanismos institucionales y normativos eficaces para lograr una recaudación proporcional, en la que las grandes empresas no evadan sus obligaciones y se combata de una vez por todas el abuso fiscal.
Precisó que México ocupa el último lugar entre las 36 economías de la OCDE por lo que respecta a la recaudación de impuestos, que apenas representa 17.2 por ciento del PIB.