La Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados aprobó, con 22 votos a favor y tres abstenciones, la reforma al sistema de pensiones. Sin embargo, acordó instalar una mesa de análisis para revisar el límite de las comisiones de las Administradoras de Ahorros para el Retiro (Afore) previsto en el dictamen.
De acuerdo con el proyecto, las comisiones por la administración de fondos de pensiones estarían sujetas a un monto máximo equivalente al promedio aritmético de los cobros aplicables en los sistemas de Estados Unidos, Colombia y Chile.
No obstante, la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) recomendó a la Cámara de Diputados rechazar esa propuesta y evitar el establecimiento de límites máximos predefinidos, o en su caso, que la regulación obedezca a estrictos criterios técnicos y esté apoyada por las mejores prácticas regulatorias del sector.
“La Cofece recomienda no aprobar la iniciativa en sus términos, toda vez que el mecanismo que propone para regular las comisiones resulta inflexible”, señaló en sus recomendaciones dirigidas a los legisladores.
Entre otros aspectos, el dictamen de la Comisión de Hacienda prevé reducir de mil 250 a mil las semanas de cotización al Seguro Social para tener derecho a una pensión. Además, aumentar la aportación total a las cuentas individuales de los trabajadores de 6.5 por ciento, más cuota social, a 15 por ciento, incluyendo la cuota social.
“Se considera propicio que la aportación que realizan los trabajadores se mantenga en sus términos; la aportación patronal se eleve de 5.15 por ciento a 13.87 por ciento, y la aportación del Estado modifique su composición para beneficiar a los trabajadores de menores ingresos, sin incrementar su monto total”, señala.
El incremento de la aportación patronal se hará gradualmente de 2023 a 2030, mientras la recomposición de la aportación del Estado entrará en vigor en 2023.
La reducción de las semanas de cotización será gradual e iniciará si entra en en vigor la reforma, con un requisito de 750 para tener derecho a una pensión. Asimismo, se irá incrementando gradualmente hasta alcanzar un total de mil semanas de cotización en 2031.
“Lo anterior enmendará el diseño de la Ley del Seguro Social, en vigor a partir de julio de 1997, que deja sin acceso al derecho a una pensión a la mayoría de los trabajadores, toda vez que, de seguir así, únicamente 34 por ciento de los trabajadores afiliados al Sistema de Ahorro para el Retiro tendrán derecho a recibir una pensión garantizada”, detalla el proyecto.
La Comisión de Hacienda manifestó su respaldo a la propuesta presidencial de aumentar el monto de la pensión garantizada que se otorga a los trabajadores que, cumpliendo con los requisitos para gozar de las prestaciones de cesantía y vejez, no tienen los recursos suficientes en su cuenta individual para obtener una pensión mayor a dicho monto.
Para ello, se modifica la forma de determinar el monto de dicha pensión, que actualmente puede ser hasta 3 mil 289 pesos, para que en lo sucesivo se calcule considerando las semanas de cotización, que se reducen de mil 250 a mil, el promedio del salario base de cotización que el trabajador obtuvo durante su vida laboral y la edad del trabajador.