El presidente Andrés Manuel López Obrador dio la bienvenida a los Premios Nobel de la Paz que asisten este fin de semana a la Cumbre Mundial de Premios Nobel de la Paz en esta ciudad del sureste mexicano.
En su discurso previo a la cena de los invitados, que se congregan en la Hacienda San Antonio Hool, López Obrador rememoró al ex presidente de Sudáfrica, Nelson Mandela, y a Benito Juárez, y les dijo a los asistentes que se les admira.
“Es muy importante este encuentro por el significado de la paz y por los protagonistas, por quienes han participado y han hecho posible la pacificación de los pueblos”, dijo.
Además, expuso que en México se viven problemas de inseguridad y violencia, pero dijo que se apuesta a la solución pacífica de los conflictos.
“Lo que queremos es conseguir a plenitud la paz y no queremos una paz lograda con autoritarismo, con el uso de la fuerza, no queremos una paz de los sepulcros, queremos una paz que se origine con la impartición de la justicia, siempre hemos dicho que la paz es fruto de la justicia”, dijo el presidente.“Nosotros tenemos problemas de inseguridad y violencia y se ha querido enfrentar ese flagelo de la violencia con el uso de la fuerza, con cárceles, amenazas de mano dura, condenas más severas, inclusive con actos en extremo autoritarios, con razzias, con masacres, con exterminios y ha quedado demostrado que eso no funciona, que tenemos que atender las causas que originan la violencia”, agregó.
Comentó a los invitados que “ahora nosotros tenemos la dicha enorme de poder llevar a cabo una transformación sin violencia, de manera pacífica, pero no por eso es más de lo mismo, no es un simple cambio de gobierno, no es algo que se queda en la superficie, no es un simple cambio de gobierno, es un cambio de régimen”.
Ante los asistentes, entre los que están Rigoberta Menchú y Juan Manuel Santos, aseguró que “el ser humano no es malo por naturaleza” y que eso “es un pensamiento caduco, anacrónico, conservador”.
Además les explicó que la estrategia de pacificación en México incluye dar oportunidades de estudio y trabajo a los jóvenes, a quienes se les había calificado como ninis en el pasado, sin atender sus necesidades reales.
“Me da mucho gusto estar aquí esta noche en Yucatán con invitados tan importantes, todos los premios Nobel, las mujeres, los hombres, las instituciones”, dijo y agradeció la invitación del gobernador Mauricio Vila, de quien dijo, es un “extraordinario gobernante de un gran pueblo, este pueblo de Yucatán, lleno de historia lleno de cultura”.
Finalizó dando la bienvenida al país: “están en México, que es un país de todas, de todos ustedes, el país que busca la fraternidad universal, que busca la paz en el mundo”.
AE