El presidente Andrés Manuel López Obrador condenó el abuso de autoridad del gobierno de Rutilio Escandón en Chiapas, que reprimió con un operativo policiaco a estudiantes y la caravana de madres y padres de los 43 alumnos normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, quienes llegaron a una visita a la Normal Rural Mactumactzá, por lo que pidió se investigue y se castigue a los responsables de los hechos.
“Condeno lo que sucedió en Chiapas, fue un abuso de autoridad, más que eso, que debe ser investigado y castigado”, dijo el mandatario mexicano en su conferencia matutina de este lunes.
López Obrador precisó: “nosotros no somos simuladores, por lo que no somos represores”, al tiempo que reprobó lo ocurrido en Chiapas en la mañana del pasado domingo, donde resultaron heridos dos estudiantes normalistas, una madre de los 43, además de una niña que resultó con quemaduras y otros menores de edad afectados con gases lacrimógenos.
La agresión cometida por más de un centenar de agentes de seguridad pública contra estudiantes y los familiares de los 43 desaparecidos, un día antes de que iniciaran desde el sur de México con la caravana de lucha que recorrerá varios estados de la República, desató una serie de críticas y peticiones de que esclarezcan los hechos y se castigue a los culpables, como la de Secretaría de Gobernación (SEGOB) que de inmediato, a través de sus redes sociales, solicitó una exhaustiva investigación.
La titular de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, manifestó su respaldo a los padres de los 43 normalistas desaparecidos y exigió al gobierno de Chiapas tome todas las medidas necesarias para que esclarezca los hechos y castigue a los culpables.
El Comité de padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa precisó que el desalojo violento del que fueron objeto los estudiantes y los integrantes de la caravana ocurrió mientras realizaban en un crucero acciones de volanteo para la invitación a una marcha con la que en la tarde iniciaría la caminata de la lucha, al tiempo que señaló que los padres de la caravana buscaron el diálogo con los agentes antes de que fueran agredidos.
También aclaró que la caravana de madres y padres de normalistas desaparecidos arribó a las seis de la mañana a las instalaciones de la Normal Rural Mactumactzá, y como parte del programa se contemplaba reunirse con la comunidad estudiantil y posteriormente con las organizaciones sociales para iniciar una marcha a las cinco de la tarde, pero fueron atacados por la policía, con un saldo de varios heridos, entre ellos un estudiante de la Normal Isidro Burgos que se encuentra grave.
El hecho desató la preocupación e indignación del Gobierno Federal, la sociedad y de instituciones; toda vez que el contingente tiene programadas visitas a las escuelas normales rurales del todo el país.