El presidente Andrés Manuel López Obrador reavivó la confrontación con el partido republicano de Estados Unido al retar al senador Lindsey Graham a responder sobre la responsabilidad del país en el combate al fentanilo y el tráfico de armas.
En la conferencia mañanera, López Obrador recordó que fue Graham quien cuestionó a los secretarios de Estado, Antony Blinken y de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas cuando dijeron que en México sí había territorios controlados por el crimen organizado.
“La siguiente pregunta es quién distribuye el fentanilo en Estados Unidos, o mejor, si hay capos, si hay carteles que distribuyen el fentanilo en Estados Unidos. La tercera, si los que distribuyen el fentanilo en Estados Unidos son mexicanos o estadunidenses, si se les persigue a los que distribuyen el fentanilo y se les castiga en Estados Unidos. Y una más, si se puede comprar o no una ametralladora o un arma de alto poder en los supermercados de Estados Unidos, sí o no”, preguntó.
El Presidente le dio la oportunidad de agregar más información en torno a los programas que tienen en la unión americana para evitar el consumo de drogas entre los jóvenes y si están trabajando para garantizar que tengan acceso al estudio y el trabajo.
“Además, lo digo con todo respeto, así a distancia seguir polemizando con él sobre estos temas porque es ir al fondo es atender las causas, no es querer enfrentar como suele pensarse la violencia con la violencia, el mal con el mal. Y pensar que los problemas sociales se resuelven solo con el uso de la fuerza, leyes más severas, cárceles, amenazas de mano dura”, puntualizó.
Aun con la polémica, el mandatario aseguró que México seguirá colaborando con Estados Unidos para que no llegue el fentanilo a su territorio, trabajo que aseguró no se hace “por miedo a sus amenazas intervencionistas” sino por la convicción humanitaria del gobierno mexicano.
Asimismo, le recordó que según las estadísticas, solo el 25 por ciento del fentanilo que se consume en Estados Unidos llega por México mientras que el 75 por ciento ingresa directamente por el territorio de ese país o por Canadá.
“El senador que es tan influyente puede hacer mucho para que no se den estas muertes, por ejemplo, el control de las armas, por ejemplo, que se persiga a los que distribuyen el fentanilo, por ejemplo, que se apruebe una campaña de información, de orientación sobre el daño que causa el fentanilo”, agregó.
DM