El entendimiento comercial entre Estados Unidos y México en el marco de la re negociación del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN) será adjudicado por el gobierno de Enrique Peña Nieto como un logro de su sexenio, pero fue posible por el triunfo electoral de Andrés Manuel López Obrador, aseguraron académicos de UNAM.
En conferencia de prensa, los profesores Roberto Zepeda y Leonel Carranco, especialistas en Relaciones Internacionales, aseguraron que la simpatía entre el presidente Donald Trump y López Obrador, así como la flexibilidad de éste en su relación con Estados Unidos facilitó destrabar la negociación.
El reto ahora, continuaron, será empalmar las agendas de desarrollo de cada gobierno con el nuevo acuerdo comercial entre ambos países.
“Yo diría que fue determinante la colaboración del gobierno entrante, de Andrés Manuel López Obrador, porque incluso lo que se advierte es que desde el principio de las negociaciones, la actual administración, de Peña Nieto, tenía una meta; de hecho, ellos pidieron que las negociaciones formales terminaran en diciembre de 2017 para así, llegar a un proceso electoral con un logro, que era la negociación del TLC”, explicó Roberto Zepeda, investigador del Centro de Investigaciones sobre América del Norte (CISAN), de la UNAM.
Ante la ausencia de dicho logro, dijo, se aplazó la meta a marzo, pero tampoco se destrabó la negociación antes de las elecciones.
“No lograron salvar los puntos más difíciles de esta negociación, el tema del contenido regional y el tema de la cláusula sunset, que justamente encuentran un punto de solución a partir de la elección de Andrés Manuel López Obrador, quien, con una postura más flexible sobre estos temas, ayudó a destrabar la negociación, de tal manera que en un mes y medio ya se tiene este acuerdo bilateral porque también otra de las posturas de la administración actual, de Peña Nieto, era negociar de manera trilateral.
"Llama mucho la atención que llega López Obrador y se negocia de manera bilateral y ya se está hablando de un acuerdo bilateral”, dijo Zepeda luego de su participación en la conferencia sobre el acuerdo comercial, ofrecida en el Instituto de Geografía de la UNAM.
Por ello, “para mí, el punto clave es la llegada de AMLO que, aunque no ha tomado el poder y está como observador nada más, fue determinante”, dijo.
Leonel Carranco, de la FES Aragón, explicó que ante la evidente simpatía entre Trump y López Obrador podría surgir una etapa de crecimiento económico interno.
“Tienen que empatar las dos agendas con el tratado y va a ser un trabajo de bastante esfuerzo del grupo económico de Andrés Manuel y a lo mejor estamos, no sabemos los planes como tal, ante un desarrollo acelerador del mercado interno, que te lleve rápidamente, tres a cuatro años, a acelerar esta producción; ha habido casos históricos de aceleración de desarrollo económicos, lo vimos en una parte en Corea del Sur, por los 80, 85, puede ser que estén planeando eso”, dijo.
Los académicos dijeron que es probable que el
TLCANquede en un acuerdo bilateral entre México y Estados Unidos y que México deba buscar un acuerdo con Canadá por su cuenta porque lo mejor es que el acuerdo continúe como un tratado trilateral.
OVM