Luego de que gaseros de la Zona Metropolitana del Valle de México, así como de Oaxaca, Veracruz, Hidalgo y Puebla protestaran por el bajo margen de ganancia que obtienen por la venta de gas LP, el presidente Andrés Manuel López Obrador descartó que haya riesgo de desabasto, y confió en que su gobierno atienda las demandas y el suministro del combustible.
En La Mañanera, el mandatario recordó que su gobierno ha implementado dos medidas para combatir los altos costos del gas: establecer precios máximos para su venta y la creación de Gas Bienestar.
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“No creo que pase a mayores, ya se les está atendiendo. Ya se tiene establecido el mecanismo del Gas Bienestar y lo podemos ampliar. No hay riesgo de desabasto”, dijo.
López Obrador recordó que los distribuidores se pueden integrar a Gas Bienestar, que pretende acaparar el 51% del mercado, “porque no había contrapeso”, contrario al caso de las gasolinas o la energía eléctrica, donde, según señaló, el gobierno puede garantizar que no haya aumento en los precios.
“En el gas no podíamos, por eso se fue para arriba, porque cinco grandes empresas controlaban toda la distribución, (lo controlan todavía), sí”, añadió.
El Presidente destacó que el Gas Bienestar ya se implementó en Iztapalapa, y hasta el momento “tenemos testimonios extraordinarios”, pues declaró que los tanques de 20 o 30 kilos duran más a las familias, ya que se venden completos.
“Entonces la gente quiere más, ya tenemos ese mecanismo para atender. Hay protestas porque había la mala costumbre de extorsionar a la gente, en general. Estamos enfrentado la corrupción de arriba para abajo”, comentó.