El presidente Andrés Manuel López Obrador evitó por segundo día consecutivo dar la postura del Ejecutivo sobre el gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela y el conflicto político que se vive en ese país.
En el Salón Tesorería de Palacio Nacional, el mandatario dio por terminada la conferencia cuando se le preguntó si México iba a reconocer el triunfo de Maduro en la elección presidencial.
“Sin comentarios, vamos a desayunar”.
Antes, comentó que no había participado en ninguna conversación telefónica con sus homólogos de Brasil, Lula da Silva y de Colombia, Gustavo Petro, para tratar el conflicto venezolano.
— ¿Si tuvo diálogo sobre Venezuela?
“No, no hubo la plática”.
Pero aprovechó el momento para expresar nuevamente su respaldo al presidente colombiano porque está enfrentando a los conservadores de su país.
“Decir que es mi amigo, lo estimo, lo respeto, Gustavo Petro, presidente de Colombia, es un digno representante del pueblo colombiano, es un pueblo hermano, hermano, no primo hermano, hermano del pueblo mexicano".
“Que resistan porque los oligarcas, los privilegiados no quieren ningún cambio, son muy egoístas y que no se olvide, el conservador es muy hipócrita, ese padece amnesia, a ese se le olvida lo que ellos hacen cuando gobiernan y de repente se sacuden, ya se quieren presentar como blancas palomas y paladines de la libertad, paladines de la democracia, paladines de la justicia”.
LG