El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que, a un año y medio de su creación, la Guardia Nacional está siendo “bien evaluada” por los mexicanos, según encuestas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y de otras instituciones.
“La Guardia Nacional ya es una institución que se está fortaleciendo cada vez más, es una institución del pueblo para el pueblo. Está siendo bien calificada por los ciudadanos.
“Están casi parejas en aceptación, con más del 80 por ciento de aprobación de la Secretaría de la Defensa Nacional y Marina, le sigue la Guardia Nacional con el 70 por ciento”, dio a conocer.
Durante la inauguración del tercer cuartel de la Guardia Nacional en su gira por Michoacán, el jefe del Ejecutivo señaló que los tiempos de la guerra han quedado atrás. Por ello, esta institución busca garantizar el orden y, al mismo tiempo, respetar los derechos humanos.
“Estos son los distintivos de los nuevos tiempos, ya no es declarar la guerra, ya no es ojo por ojo, diente por diente, es respeto a los derechos humanos y garantizar la paz”.
Sin embargo, precisó que la tarea de garantiza la paz no depende sólo de las Fuerzas Armadas, sino de que exista la justicia y oportunidades de trabajo, al igual que buenos salarios, apoyos económicos y educación, para que los jóvenes “no sean enganchados por el crimen”.
Comparó la existencia de la Guardia Nacional con la Policía Federal y señaló que, anteriormente, los integrantes de la extinta corporación iban de un estado a otro, “apaciguaban” los conflictos y se iban.
“No, esa ya no es la estrategia, ahora son coordinaciones territoriales, 266 bases operativas, 266 cuarteles para permanecer en las regiones y no estar de un lado a otro”, indicó.
López Obrador confío en que la construcción de 266 cuarteles de la Guardia Nacional, que cuenta con casi 100 mil integrantes, esté lista a finales del 2021. Del mismo modo, se dijo confiado en que su estrategia de seguridad tendrá “mejores resultados a nivel nacional”; prueba de ello es la disminución de la incidencia de delitos de alto impacto.
Destacó que la zona se caracteriza por un alto índice de violencia, sobre todo en cuanto a los niveles de homicidio doloso, siendo Colima el estado con mayor número de estos. Explicó que dicha problemática está relacionada directamente con la entrada de drogas en el Puerto de Manzanillo, especialmente el fentanilo.
Para hacer frente al tráfico de drogas en los puertos, el Presidente destacó la reforma para otorgar el control de estos a la Marina. Al mismo tiempo, hizo un llamado a su gabinete de seguridad, para transformar la realidad, “estamos preocupado y ocupados, sabemos bien lo que hay qué hacer para llegar a la paz”, dijo.
Por su parte, el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, puntualizó que, en las de la entidad, “con frecuencia hay incidentes delincuenciales, cerca de la frontera con Jalisco, con frecuencia operan grupos de delincuentes”. Por ello, pidió “neutralidad política” para acabar con las células delincuenciales, a las que calificó como “franquicias” de los cárteles.
Para reforzar el discurso de los mandatarios, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, prometió a los habitantes de Michoacán que cuentan con las Fuerzas Armadas “para garantizar su seguridad”.
LP