A un mes de terminar el gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador acumula mil 429 mañaneras.
El emblemático ejercicio de propaganda, información, confrontación y gobierno se ha llevado a cabo, la mayoría de las veces, en Palacio Nacional y solo 146 en diferentes entidades del país en compañía de gobernadores y el gabinete de seguridad.
El récord histórico del Presidente marca que la conferencia más larga fue el 30 de octubre de 2023, con una duración de 3 horas, 35 minutos y cinco segundos, cuando se dio un largo informe sobre las acciones de atención por el impacto del huracán Otis en Acapulco.
Antes, la marcha más larga era del 26 de diciembre de 2022, con 3 horas y 27 minutos, y antes fue el 5 de diciembre del mismo 2022 con 3 horas y 18 minutos.
Mientras que la conferencia más corta fue el 11 de marzo de 2019, cuando cumplió 100 días de gobierno y únicamente firmó el decreto para cerrar de manera permanente el penal federal de las Islas Marías.
En este año, López Obrador ya encabezó 170 conferencias, 14 de ellas fueron foráneas.
Las conferencias del Presidente fuera del Salón Tesorería se desarrollaron en Tabasco, Yucatán, Guerrero, Puebla, Chiapas, Quintana Roo, Tamaulipas, Michoacán, Baja California, Baja California Sur, Oaxaca, Veracruz y Sinaloa.
Es decir, el único estado de oposición desde donde ofreció una mañanera fue en Yucatán, donde gobernaba el panista Mauricio Vila.
Este año han sido pocas las ocasiones en que se suspendieron las conferencias.
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Como cada año, no se llevó a cabo el 1 de enero, ni jueves y viernes santo. Pero, además, en esta ocasión dos días hábiles antes de la elección presidencial no hubo mañanera, para respetar la veda y reflexión del voto ciudadano, y el 5 de febrero porque presentó su propuesta de 20 iniciativas de reformas.
Durante este año, el presidente López Obrador no ha sido suplido en ninguna ocasión en sus conferencias mañaneras, como ocurrió en años pasados cuando enfermó de covid.
Para el presidente López Obrador, las mañaneras son su principal arma de comunicación y gobernanza.
Les ha dado tal relevancia que a lo largo de su administración ha insistido en que deben continuar, al menos en el siguiente gobierno: “hay que inventariarlas, que no se vayan”, dijo a principios de este año.
"Cada quien tiene su forma, pero sí hay que informar, garantizar el derecho a la información y no dejarle este asunto tan importante porque un pueblo informado es un pueblo consciente, es un pueblo politizado, un pueblo que sabe de sus responsabilidades y de sus derechos”, destacó el 15 de enero pasado.
Y la propuesta permeó. Hace 20 días, la presidenta electa Claudia Sheinbaum informó que las conferencias matutinas, conocidas como "las mañaneras", continuarán en su administración.
"Se van a tener que levantar temprano, ya tomé la decisión de a las 6 de la mañana el gabinete de Seguridad, y a las 7:00 la mañanera", dijo.
Por lo pronto, el presidente López Obrador ya dijo que hasta el último día de su gobierno, el lunes 30 de septiembre, va a llevar a cabo una mañanera, aunque será diferente, ya que adelantó, será un "fiestón" con chocolate, café, tortas de lechón, tamales, cochinita pibil, sacahuil, unas tortas de tamal, tortas de chilaquil, guajolotas, picadas de Veracruz y tlacoyos.
"Les voy a decir que vamos a despedirnos pero va a ser fiestón, se van preparando eh, porque el lunes, el martes es el día de la entrega de la banda, que es martes primero, el 30 es lunes, ese día, porque va a ser la última mañanera", concluyó.
EHR