El presidente Andrés Manuel López Obrador aclaró que la instrucción de aplicar un nuevo recorte a las secretarías federales no implicará despido de personal, sino más ajustes en gastos burocráticos.
Luego de que el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, declarara que el mandatario instruyó el comienzo de un nuevo recorte a dependencias, y que desde diciembre anticipó que sería para el segundo trimestre de su gobierno, López Obrador aclaró que esto no implica ajuste de personal.
“No, no, no, eso también es distinto a la antigua política neoliberal, aquí los ahorros no se vinculan con despidos, aquí es que el servidor público aprenda a vivir en la justa medianía. Se acaban los abusos, ya no hay burocracia dorada”, dijo.
Insistió en que acabando con los excesos, los viajes al extranjero, el pago de viáticos y de otros gastos para los funcionarios de primer nivel, en septiembre logrará una bolsa de ahorro de 200 mil millones de pesos que dejará para casos de emergencia o para aumentar los programas sociales.
“Si seguimos así en septiembre reforzamos programas, que tengamos más recursos para las tandas del bienestar, para perforar pozos petroleros, avanzar en las refinerías, para lo que se necesita para el desarrollo”, explicó.
Explicó que el próximo lunes tendrá una reunión con su gabinete y evaluará estos nuevos ajustes, además del avance en la aplicación de los programas y en la descentralización de las secretarías.
evl