Los casos de los ex gobernadores encarcelados también son analizados en el programa de liberación de presos políticos que encabeza la Secretaría de Gobernación para garantizar que “no se trate de consignas políticas”, indicó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Explicó que hay peticiones específicas al menos en el caso del ex gobernador de Sonora, Guillermo Padrés, acusado de enriquecimiento ilícito y peculado; así como del ex gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández, acusado de peculado y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
“Les puedo comentar que hace dos o tres días cuando iba a Reynosa precisamente, dos hermanas del ex gobernador Hernández que está preso, me entregaron también una carta solicitándome lo mismo y así en varios casos”, dijo.
Señaló que están recibiendo todas las peticiones y “a nadie se le niega la posibilidad de revisar su caso”, pues insistió en que tanto el caso de estos dos ex gobernadores como otros considerados presos políticos están en revisión por parte de la secretaria Olga Sánchez Cordero.
“Nosotros no estamos rechazando a nadie y se está haciendo una revisión, actuando con mucha responsabilidad y buscando que se haga justicia; que en efecto se trate de consignas políticas para mantener en la cárcel a personas porque a muchos que les han dilatado demasiado su sentencia, que no les resuelven aun cuando no hay elementos desde el punto de vista jurídico. Ya se acaba la persecución por consigna, como lo hacían antes. Eso termina”.