El presidente Andrés Manuel López Obrador se persignó “para que no vuelva la ‘maleantada’ de corruptos y racistas” al gobierno y reconoció que algunos militantes de Morena actúan con viejas prácticas porque “aún no acaba de nacer lo nuevo y morir lo viejo”.
En conferencia matutina, consideró normal que los opositores sigan criticando todas sus decisiones, sobre todo en materia de seguridad, pero dijo que pese a ello su gobierno ha demostrado que ve por los más necesitados y da resultados.
“Lo que quiero es que en el peor de los casos, hasta me voy a persignar, cruz, cruz, cruz, que se vaya el diablo y venga Jesús; y también toco madera, si regresa la maleantada, los corruptos, los racistas, los desleídos, que ya no puedan dar marcha atrás, que los ciudadanos ya puedan quitarlo de manera pacífica con la revocación de mandato, ¿qué van a hacer si la pensión a adultos mayores va a ser rango constitucional? ¿Cómo van a hacer para volver a condonar impuestos?”, agregó.
Indicó que aunque respeta las críticas, no es algo por lo que se deje llevar porque si no, no tendría tiempo para gobernar.
“Respetamos a los opositores, nada más que no dejarnos llevar por los cuestionamientos porque imagínense, si yo me guiara por lo que se dice en los periódicos o en los programas de radio o en los reportajes de televisión, los cuestionamientos al gobierno, pues no podría hacer nada.
“Pero como tengo mi conciencia tranquila y tenemos el apoyo de la gente, pues vamos adelante para cumplirle a México y con mucho entusiasmo y mucha alegría, sin preocuparnos sino ocuparnos de la transformación”, aseveró.
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López Obrador aseguró que a dos semanas de cumplir un año como presidente, está satisfecho por el desempeño de su gabinete, que lo hacen sentir muy respaldado y que actúa con mucho profesionalismo.
icc