Tras darse a conocer que en el último mes han sido asegurados 523 migrantes en Nuevo León, el analista de política internacional, Rolando San Miguel Garza, opinó que se debe reforzar la frontera sur del país para bajar el flujo de indocumentados al estado.
Explicó que la frontera de México con Guatemala tiene una extensión de 960 kilómetros, donde están localizadas alrededor de 10 estaciones migratorias. Sin embargo, hay más de 200 puntos por los que entran de manera ilegal los migrantes, de acuerdo con estudios del Consejo Nacional de Población (Conapo).
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“Tenemos más de 200 puntos donde entra la gente sin documento alguno (…) Es una frontera muy porosa, están identificados pero no tenemos la capacidad de controlar todos esos puntos”, indicó.
Garza se mostró a favor de una migración regulada, en donde las personas que entren al país se identifiquen, pero estuvo en contra de que los indocumentados utilicen a México como una ruta para llegar a Estados Unidos.
“México está dispuesto a colaborar con las hermanas repúblicas del Salvador, de Guatemala y de Honduras, siempre y cuando esas personas vengan a México, pero que México no sea un punto de cruce hacia los Estados Unidos.
“Si esas personas requieren venir a México bienvenidas, pero que se registren y participen en los programas que están contemplados en el Plan Nacional de Desarrollo de la Presidencia de la República”, dijo.
Opinó que la migración también trae consigo otros problemas como la trata de personas, y por eso debe regularse y controlarse.
“Las caravanas de cubanos que están llegando a México, eso es un gran negocio que lo controlan grupos cubanoamericanos y más o menos (reciben) una participación entre 20 y 25 mil dólares por cabeza, entonces (ocurre), el tráfico de personas básicamente está en manos de los cubano americanos”, aseguró.