El presidente de la Comisión de Turismo del Senado, Antonio García Conejo, pidió al gobierno federal rectificar su decisión de reanudar la construcción del Tramo 5 del Tren Maya con un decreto que considera el proyecto como de seguridad nacional, porque la medida carece de fundamentación y motivación, además de que violenta el artículo 25 de la Constitución que privilegia la conservación del medio ambiente.
El senador del PRD dijo que, de manera personal, no está en contra de las acciones u obras de infraestructura que favorezcan el turismo, pero reprobó que, recurriendo a actos que se apartan de la ley y el respeto a los demás poderes, esta administración haya decidido darle continuidad a la obra.
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“Hago un llamado a que se respete el Estado de derecho, a que se salvaguarde la legalidad, bajo el mandato constitucional y sus leyes secundarias, ya que existen previamente suspensiones de obra emitidas por el Poder Judicial”, destacó.
Explicó que la continuación de la obra sólo busca satisfacer las “visiones unilaterales” del gobierno federal, mismas que han dado la espalda a grupos ambientalistas que mostraron su preocupación por la selva y la red de cenotes ubicados en esa zona de Quintana Roo.
“Estamos a tiempo de salvaguardar el segundo pulmón más importante de América Latina y una de las reservas más grandes de agua dulce en el mundo, por lo que debe privilegiarse la protección del medioambiente”, agregó.
Sin embargo, precisó, tampoco el gobierno federal ha sido claro con la Manifestación de Impacto Ambiental, ni los costos, no sólo del Tramo 5, sino de todo el proyecto.
LP