Las comisiones de Procuración y Administración de Justicia y la de Igualdad de Género aprobaron reformas al Código Administrativo para reconocer legalmente las uniones entre personas del mismo sexo y el concubinato, luego de 13 años de discusiones y demandas de la comunidad LGBTIQ.
Tras años de lucha, entre euforia y lágrimas de alegría colectivos de la comunidad LGBTTTI recibieron la noticia del avance de la iniciativa, que llevaba tiempo en la congeladora.
Con esto el Estado de México se convierte en la entidad número 29 en reconocer los derechos de la comunidad LGBTIQ. Sólo falta que legislen a favor de estos derechos y libertades los congresos de Guerrero, Tamaulipas y Tabasco.
El Pleno votará el dictamen este jueves o incluso hasta después de las comparecencias de la Glosa del informe, en la sesión del 11 de octubre, informó el presidente de la Jucopo, Maurilio Hernández González.
Ayer señalaron que hablarían sobre el término más adecuado para este caso, ya sea que lo mantuvieran como matrimonio igualitario, o bien, unión conyugal, lo cual fue rechazado por mayoría y quedó como originalmente fue la propuesta: matrimonio igualitario.
Por ahora la comunidad LGBTTTI está de júbilo ya que se trataba de una necesidad y un derecho humano que habían pedido desde hace tiempo, sin embargo, la petición estuvo detenida por las diversas opiniones que había entre los partidos políticos, donde no llegaban a ningún acuerdo.
Otra 'batalla' que ganó recientemente la comunidad LGBT fue cuando la Legislatura del Estado de México aprobó la identidad de género y ahora las personas trans pueden acceder al trámite, hecho que les beneficia en decenas de aspectos pues el simple hecho de contar con certeza legal en su identidad les permite llevar a cabo trámites de salud y empleo formal.
La presidenta de la comisión de Igualdad de Género, Paula Jiménez calificó esta decisión como histórica.
El presidente de la comisión de Procuración y Administración de Justicia, Gerardo Ulloa Pérez, indicó que el dictamen considera que el matrimonio es una institución de carácter público y de interés social por medio de la cual dos personas de manera libre y voluntaria deciden compartir un estado de vida para la búsqueda de su realización personal y conyugal bajo las formalidades y solemnidades que establezca la ley.
La edad para contraer matrimonio es de 18 años cumplidos y respecto a las enfermedades crónicas e incurables que sean contagiosas o hereditarias, así como lo referente a la nulidad por embriaguez y el uso de estupefacientes, psicotrópicos y cualquier otra sustancia que altere la conducta y produzca dependencia, se establece que salvo cuando por escrito, sean aceptadas por el otro contrayente, se tiene un plazo de seis meses para inconformarse.
Definen el concubinato como la relación que tienen dos personas que sin estar casadas y sin impedimentos legales para contraer matrimonio viven juntas, haciendo una vida en común por un periodo mínimo de un año. No se requerirá el periodo cuando tengan hijos o hijas en común, porque en esos casos ya hay derechos y obligaciones.
“Las personas en concubinato tienen los derechos y obligaciones alimentarias de familia, hereditarios y de protección contra la violencia familiar, reconocidos en el presente Código y en otras disposiciones legales, así como el establecido para los cónyuges en todo aquello que le sea aplicable, sobre todo los dirigidos a la protección de las mujeres, de las hijas y los hijos”, estableció.
Las posturas
La diputada Beatriz Villegas, de Morena, dijo que la unión es un derecho de las personas que no le incumben al Estado. Su compañera de bancada, María del Carmen de la Rosa, señaló que este derecho no es una concesión, menos en una entidad donde al menos 3 por ciento de la población tiene preferencias sexuales distintas.
Andrés Sibaja no apoyó que el término sean uniones conyugales porque el tema ya está definido por la Corte, quien declara inconstitucional y discriminatorio un término distinto al de matrimonio igualitario.
El coordinador del PRI, Elías Rescala, consideró que la palabra matrimonio no es la adecuada por su raíz, por lo cual pidió se sustituya con “unión conyugal”.
En tanto el panista Francisco Santos, consideró que es una decisión histórica de derechos jurídicos que sí tiene 28 entidades del país. “No se vale tener dos palabras, una en lo público y otra en los oscurito. El Estado de México no se equivocará y será el estado 29.
Juana Bonilla, de Movimiento Ciudadano, consideró que esto es justicia social a favor de quienes sufren de maltrato y discriminación. Mientras, el PVEM dijo estar a favor del derecho.
¿Cómo quedó la votación?
A favor votaron quienes forman parte de las bancadas de Morena, PRD, PT, PVEM, MC, los independientes. Del PAN sólo Francisco Santos y Miriam Escalona; del PRI las diputadas Paula Jiménez y María Isabel Sánchez.
El resto del PAN se abstuvo y el PRI votó en contra.
La propuesta se aprobó por mayoría de votos en lo general. La consideración del PRI, de cambiar matrimonios por uniones fue desechada por mayoría de votos.
Hubo tres iniciativas diferentes
Las comisiones analizaron tres iniciativas de ley. Dos fueron presentadas por la bancada de Morena, una de ellas por la diputada Beatriz Villegas y otra en conjunto por Anaïs Burgos, Andrés Sibaja, María del Carmen Mendoza, Lourdes Betzabel, Max Hernández e Isaac Montoya.
La tercera fue a nombre de los tres integrantes de la bancada del PRD, Omar Ortega, María Elida Castelán y Viridiana Fuentes.
En todos los casos se propuso reformar artículos del Código Civil para reconocer legalmente los matrimonios entre personas del mismo sexo, por lo cual se analizaron en conjunto desde hace un año, aunque es un tema que lleva varias décadas en estudio, con diferentes Legislaturas.
KVS