Mientras avanzan las primeras horas de la madrugada, la rutina para el acarreo de agua de la familia Zúñiga, en la colonia Unidad Habitacional Independencia, en Apodaca, comienza. Ellos tienen más de 20 días sin agua.
Por ello, entre las 00:00 y 01:00 salen de su casa para llenar tres garrafones con los tinacos comunitarios que pusieron en la plaza pública, esto para encontrar poca gente formada.
Así, sus planes de ahorro inician con esos 60 litros que pueden juntar durante la noche, pues la familia, conformada por el padre, la madre, una niña de edad escolar y una bebé, debe ingeniárselas para completar el gasto que hacen para agua del sanitario y poderse bañar.
“Lo grave es que ya se convirtió en una rutina y a veces ni recuerdas cómo sale el agua de las tuberías”, dijo César, el padre de familia.
Con la suerte de encontrar el líquido vierten lo conseguido en un contenedor de 60 litros, para desocupar los garrafones y tenerlos libres para la mañana siguiente volver a acarrear.
“Alrededor de las 08:00 vamos y dejamos a la niña a la escuela y de ahí nos pasamos a recoger más agua; para esa hora ya hay algunas personas formadas, lo que implica esperar entre 30 y 40 minutos”, refirió Lizeth, esposa de César.
Así, suman 120 litros que mencionan apenas solventan las necesidades básicas de los miembros de la familia, sin contar el agua que toman y usan para cocinar, que compran por garrafones en tiendas de conveniencia.
Para bañarse, César y su esposa gastan 20 litros cada uno, mientras que en cada niña se usan aproximadamente 10 litros.
Suelen destinar 30 litros de agua para el sanitario y 10 litros más para el lavado de trastes con una palangana, para evitar desperdiciarla.
La familia Zúñiga ha priorizado el gasto del agua y ha eliminado trapear, regar plantas, lavar el patio e incluso llenar el aire lavado.
En total, la familia gasta alrededor de 160 litros de agua diarios (120 no potable y 40 potable) para cubrir las necesidades básicas.
Ahora solo les queda seguir con la rutina de abasto, hasta que las autoridades respeten los horarios prometidos y el agua vuelva a salir en las llaves.