El juez Baltasar Garzón afirmó que para la construcción de justicia y paz en México "no se parte de cero", pues destacó que hay esfuerzos de la sociedad civil "que se han jugado la vida".
Durante la firma de convenio de colaboración entre el Instituto Mexicano para la Justicia y la Fundación Internacional Baltasar Garzón, el juez dijo que los esfuerzos que se suman "son gente que tiene la ilusión de cambiar las cosas".
Recordó que el convenio, cuyo objetivo es la construcción de la paz, fue firmado en España y ahora se suscribe en México.
"Luchar por la justicia para cambiar las cosas y, sobre todo, creérselo eso es hacerlo con acciones. Como decía Gandhi, el esfuerzo de uno es el esfuerzo de todos. El motor de cambio más que las decisiones políticas, está en la sociedad", destacó.
Previo al conversatorio, recomendó que "es necesario construir la confianza entre las instituciones y la sociedad, cuando se rompe ese vínculo el Estado se cae".
El juez español, causante de que Augusto Pinochet fuera llevado ante la justicia, agregó que "en México y Latinoamérica estamos en un momento importante. Queremos sumar esfuerzos de otros lados a lo que se está haciendo aquí, que la justicia sea para todos".
Y aseguró que "el titular del Poder Judicial son los ciudadanos, no los jueces".
El presidente del Instituto Mexicano para la Justicia, Juan Antonio Araujo, calificó a Garzón de ser un ícono en la lucha de la justicia social, ya que "es valiente que ha cambiado al mundo".
Antonio Navalón recalcó que le tocó vivir "otra oportunidad de cambio en este país" porque los cambios "se hacen por el hartazgo de la sociedad y por el agotamiento del modelo" que impulsan los gobierno.
Determinó que México está en un momento clave y se pronunció por seguir adelante para "que lo que se dice no sea un sueño y para eso hay que partir de cero".
El abogado Juan Antonio Araujo mencionó que la detención de Genaro García Luna fue "un milagro que vino de parte de Estados Unidos, no del gobierno mexicano".