El cáncer de piel es uno de los más frecuentes en el Estado México, solo en el Centro Oncológico Estatal “Dr. José Luis Barrera Franco”, del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (Issemym) se atienden aproximadamente 2 mil casos al año, informó la especialista de este centro.
“Es el más frecuente en todo el mundo, en el Estado de México también tenemos muchísimos casos, hay varios tipos y es muy prevalente en el Centro Oncológico, seguramente tendremos más de 2 mil casos al año, de los tres tipos de cáncer de piel”, detalló la oncóloga médica, Sandra Vargas Meléndez.
Explicó que este cáncer se caracteriza por un crecimiento anormal de los diferentes tipos de células en las capas de la piel, por ello, se clasifica en al menos tres tipos: el carcinoma basocelular, epidermoide y melanoma. Indicó que este padecimiento afecta las capas de la piel, que son la dermis y epidermis, por lo que también se diferencia como el cáncer melanoma y el cáncer no melanoma.
“El basocelular y el epidermoide se caracterizan por tener un muy buen pronóstico, generalmente son lesiones que no se extienden a otros órganos, permanecen localizados, lo que permite que se les pueda dar una terapia curativa. En cambio el melanoma, que es el tercer tipo de cáncer de piel, afortunadamente es el menos frecuente; pero es el más agresivo”.
Indicó que en el caso del melanoma se tiende a diseminar a otros órganos, por lo que reiteró la importancia de conocer algunos de los signos de alerta. La especialista del Issemym añadió que uno de los tipos más frecuentes es el carcinoma basocelular, pues se sabe que aproximadamente uno de cada cinco mexicanwos lo va a desarrollar y prácticamente en 95 por ciento de los casos se va a quedar solo en la piel, le sigue el epidermoide y el melanoma, que es el menos frecuente.
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Tratamiento
En cuanto al tratamiento, explicó, si el cáncer se detecta en una etapa localizada, que es justamente lo que pasa en la mayoría de los tipos de cáncer no melanoma, se puede lograr la cirugía y retirar todo el tumor y ya no se requiere de algún tratamiento extra, solo la vigilancia y en la mayoría de los casos las y los pacientes permanecen sin la enfermedad toda su vida.
La especialista señaló que en el caso del melanoma, cuando se diagnostica se tienen que aplicar distintas pruebas para descartar que no haya viajado a otro sitio y dependiendo de la etapa en la que se encuentra dependerá si se requiere de una cirugía, radioterapia o inmunoterapia.
Signos de alerta
Entre los signos de alerta se encuentran las lesiones o lunares que vayan cambiando a lo largo del tiempo, asimétricos, con un diámetro mayor a cinco milímetros, con bordes indefinidos, sangrado espontáneo o con estímulos menores y ulceraciones que no cicatrizan.
Recomendó cuidarse de la radiación solar usando constantemente protector solar Desde la infancia, utilizando productos acordes con la edad. “Justo en la infancia es donde menos protegidos están los niños y donde adquieren mayormente el riesgo de desarrollar cáncer en una edad adulta”.