Ante la saturación de los 18 macro kioscos donde se realizan pruebas gratuitas para detectar la covid-19, los habitantes de la Ciudad de México prefieren acudir a una farmacia privada y pagar por el estudio.
“Hay muchísima gente y normalmente no alcanzas fichas”, señaló Maricela Vega, quien acudió a la Farmacia San Pablo que se ubica en la colonia Jardín Balbuena, en la alcaldía Venustiano Carranza, para realizarle una prueba de antígeno a su hijo, por instrucción médica, ya que presenta dolor de cabeza y diarrea.
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Precisó que el tiempo de espera en las farmacias y laboratorios privados es mucho menor al de los macro kioscos, pues se reduce de más de 3 horas a hasta 30 minutos.
Algunas personas acuden a realizarse la prueba debido a que estuvieron en contacto con algún caso positivo, otros porque presentan síntomas relacionados con el coronavirus, pero también hay quienes solamente lo necesitan porque es un requisito que les solicitan en sus empleos o para poder viajar, por lo que dicen, que no cuentan con el tiempo que se requiere para poder asistir a un macro kiosco.
Brandon Torres, un joven que acudió a la Farmacia San Pablo de la colonia Roma Norte, en la alcaldía de Cuauhtémoc, mencionó que cada 15 días le piden una prueba negativa en su trabajo: “es un proceso que inició desde que dejamos de hacer home office, entonces nosotros las tenemos que llevar”, además, señaló que “por la aglomeración de gente (en los macro kioscos) es más seguro realizarse aquí el estudio (en la farmacia)”.
Las filas afuera de las farmacias y laboratorios privadas son cada vez más largas y notorias, esto, luego que durante varios meses lucieran prácticamente vacías.
El costo de las pruebas de antígeno en dichos establecimientos va de los 250 a los 400 pesos, un precio que aseguran es accesible, a diferencia de las pruebas PCR.
“Al principio de la pandemia, la primera ola, cada prueba te costaba mil 500 (pesos) y si eran cuatro los sospechosos, pues ya era una fuerte cantidad, pero ahora creo que avanzado la tecnología la medicina y pues este tipo de pruebas”, expresó Nelly Martínez, una joven que también acudió a la Roma Norte, debido a que en su trabajo “varios compañeros resultaron positivos la semana pasada”.
Cabe recordar que el convenio que hizo el gobierno de la Ciudad de México para que se realizarán pruebas gratuitas en farmacias y en centros comerciales concluyó el pasado 30 de junio, por lo que los estudios que están realizando actualmente tienen un costo. No obstante, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, refirió que el acuerdo podría renovarse.
FS