Con música pop y un poco de reggaetón, arrancó la vacunación anticovid para adultos de 18 a 29 años en la Escuela Nacional Preparatoria (ENP) Número 9, ubicada en Insurgentes Norte, en la Alcaldía Gustavo A. Madero, en la Ciudad de Mexico.
Desde muy temprano se formó una larga fila para la inmunización, los jóvenes estaban muy emocionados porque por fin les llegó su turno, “No me creía (mi mamá) que iba a venir, me paró desde las 6:30 para venirnos y ser los primeros.
-Oye ¿y por lo menos te dio de desayunar?
-Sí, porque si no, adentro nos ponemos malos.
-¿Qué te dio de desayunar?
-Me dio lechita y galletas”, dijo Adriana Ramírez.
Los alrededores de la Prepa “Pedro de Alba”, evocaron a un ambiente escolar, ya que se vio a cientos de padres de familia esperando a sus hijos, como cuando los esperaban a la hora de la salida.
“No, ella no se va de pinta, es muy buena niña, la acompañé, porque en un momento especial tenemos que estar apoyando a los hijos, así como ellos nos apoyan a nosotros”, indicó la señora Yolanda Vega, madre de una joven vacunada.
Esta compañía hizo que el “piquete” no fuera tan doloroso, “no, la verdad es que la chica que me vacunó muy bien, no sentí nada, me dijeron que me iba a arder, pero realmente no sentí ningún tipo de ardor”, aseguró Angélica Cruz, luego de recibir la primera dosis de Sputnik V.
Esta jornada de vacunación también fue aprovechada por jóvenes que tienen alguna discapacidad, como Javier Aguilar, de 24 años y quien, acompañado de su madre, llegaron muy temprano a las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Ambos quedaron muy satisfechos con la atención, “no, no, inclusive nunca llora cuando lo inyectamos ni nada, él estuvo muy tranquilo, nos sentamos y ya le estuvo preguntando la doctora muy amablemente si le dolía algo, si sentía cualquier cosa que le avisara, pero no”, dijo la señora Lucía Bazán, madre de Javier.
Para este chico, todo estuvo bien excepto por un detalle: no pudo bailar.
- “¿Cuál querías bailar?
-Reggaetón.
Además, el primer día de la jornada de vacunación para las personas de 18 a 29 años fue la ocasión ideal para refrendar el amor, tal y como ocurrió con Irving y Joseline, quienes son novios desde hace varios meses.
“Es una cita especial porque yo en lo particular no me quería vacunar, pero me explico más o menos mi novia y se conciencia por eso es que me vacuné”, comentó Irving.
“Significa otro paso más a cuidarnos, a entrar a la normalidad”, dijo Joseline.
De acuerdo con las autoridades del gobierno capitalino, los jóvenes de 18 a 29 años, recibirán la segunda dosis de la vacuna anticovid Sputnik V entre 21 y 90 días después de la primera vacuna.
ledz