Sin quererlo ni buscarlo, Clara Brugada se convertirá - a partir de este sábado - en la décima jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
Empujada y convencida por los llamados “duros” de Morena a competir por ese cargo, Brugada ahora tendrá la tarea de conducir las riendas de una de las capitales más complejas del continente, y uno de los bastiones más importantes del movimiento de la cuarta transformación.
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Trayectoria
La próxima mandataria capitalina tiene una trayectoria de más de 40 años en la lucha social. Ganó su primer cargo de elección popular a los 32 años, al ser elegida como consejera ciudadana en Iztapalapa.
Cuenta con una amplia experiencia legislativa y de servicio público de casi 30 años, pero asegura que no es una política tradicional, porque nunca buscó los cargos.
Sus cercanos la califican como una luchadora social incansable y una funcionaria cercana a la gente, que escucha y que le gusta tomar decisiones colectivas.
“Es alguien que tiene una trayectoria de lucha impresionante, que ha estado conviviendo en las zonas menos favorecidas de la ciudad, que ha decidido entregar su propia vida a mejorar las condiciones de la gente que más lo requiere en la Ciudad de México.
“Y eso es algo muy valioso para alguien que gobierna, porque sabe los problemas de la gente, ha convivido con estos problemas, ha solucionado parte de esos problemas en un territorio nada sencillo como Iztapalapa y que ahora todo ese cúmulo de experiencia lo va poner al servicio de los habitantes de toda la Ciudad de México”, expuso su próximo secretario de Gobierno, César Cravioto, al ser consultado por MILENIO.
Su historia en la vida pública comenzó en 1984, cuando estudiaba la carrera de Economía en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), campus Iztapalapa, licenciatura que, por cierto, cursó para conocer a fondo las desigualdades estructurales de la sociedad.
Brugada - quien entonces tenía 21 años y vivía en la colonia Nativitas de la alcaldía Benito Juárez - fue invitada a dar clases en una secundaria comunitaria, ubicada en San Miguel Teotongo, Iztapalapa, un barrio popular de la capital del país.
Clara aceptó el reto, pero fue más allá. Dejó las comodidades de su hogar y a su familia para mudarse a dicha colonia, en la cual vive desde entonces.
Pasó más de 10 años en movimientos sociales en esa zona, a favor de la salud, medio ambiente y alimentación de los más necesitados. Ahí aprendió organización y trabajo en equipo, aspectos que le sirvieron mucho en su carrera de servicio público, pero, en esa época, no pasaba por su mente ser política.
Así se encontró con AMLO
Fue en ese periodo (1991) cuando conoció al ex presidente Andrés Manuel López Obrador. El tabasqueño y su grupo realizaban el éxodo por la democracia y al llegar a Iztapalapa, fueron recibidos por vecinos de San Miguel Teotongo.
“Les dimos albergue, les dimos solidaridad. Llegaron todos los tabasqueños a la plaza cívica de San Miguel Teotongo, y ahí cientos de mujeres promotoras de salud les dieron masaje en los pies, a los tabasqueños que venían caminando con sus pies cansados, con sus pies heridos, se les dio de comer, se les buscó un lugar donde dormir, ahí conocí a Andrés Manuel López Obrador, luchando en San Miguel Teotongo, y desde ahí seguimos juntos hasta la victoria”, narró Bugada en un video publicado en Facebook el 31 de octubre de 2023.
Desde entonces, Clara caminó al lado de López Obrador en diversas movilizaciones, como las protestas contra su desafuero, el Fobaproa, la reforma energética y el fraude electoral de 2006, siempre en primera línea.
Años después, fue elegida consejera ciudadana, y, en 1997, impulsada por sus vecinos y compañeros, compitió y ganó una diputación federal por el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
En el 2000 fue diputada en la entonces Asamblea Legislativa del Distrito Federal y, en el 2003, nuevamente ocupó una curul en San Lázaro.
En el 2006 fue nombrada procuradora social del D.F. durante el sexenio de Marcelo Ebrard, mientras que, en el 2009, se convirtió en jefa delegacional de Iztapalapa, por primera vez.
En el 2016 fue elegida diputada Constituyente de la Ciudad de México y, en el 2018, ganó la elección a la alcaldía de Iztapalapa, donde fue reelegida en el 2021.
En esta etapa fue cuando más trabajó y convivió con la ahora presidenta Claudia Sheinbaum - entonces jefa de Gobierno -.
“Claudia Sheinbaum y yo somos compañeras de mil batallas, aquí hace algunos años, cuando ella era secretaria de Medio Ambiente y yo diputada, la invitamos a recorrer la sierra de Santa Catarina.
"Los años pasan pero las convicciones siguen firmes”, escribió Brugada el ocho de febrero de este año en sus redes, publicación que acompañó con una fotografía de ambas.
En el 2023, Clara Brugada tuvo que tomar la decisión más trascendente de su vida política: competir por la candidatura de Morena a la Jefatura de Gobierno. En principio, no quería participar en este proceso, pero la convenció el ala dura de Morena.
“Fue lo mismo que en todos mis cargos. Hubo una gran cantidad no sólo de la base social que siempre quiere que sigas más y más, sino de muchos compañeros y compañeras que yo respeto mucho y quiero mucho, que me decían, ya has hecho un gobierno muy importante, transformador, necesitamos personas como tú en la ciudad, y yo, ´no, no, no´.
"Pasó así mucho tiempo hasta que pues fui convenciéndome que sí podíamos jugar ese papel”, le confió Brugada a Alejandro Domínguez, en una entrevista transmitida el 11 de abril de 2023.
César Cravioto - quien será su secretario de Gobierno - e integrante de este sector de Morena, expuso que la decisión de que Brugada fuera la candidata no era exclusivamente de ella, sino del movimiento en conjunto.
“Como dice el ex presidente López Obrador, a veces no es que sean decisiones propias, sino el propio movimiento te va llevando, y en el caso de Clara, pues se dieron las condiciones para que alguien con su trayectoria pudiera encabezar este proyecto.
“Yo creo que gran parte de los dirigentes del movimiento no estamos ahí para buscar un cargo personal, sino para servir a un proyecto, a un movimiento, a una transformación. Y pues a ella le tocó justamente por esa trayectoria, por esa experiencia, y por este momento histórico encabeza los destinos de la Ciudad de México y continuará, estoy seguro, con mucha convicción, con mucha eficiencia”, apuntó.
Cravioto agregó que los capitalinos merecen una gobernante como Brugada Molina.
“Su trayectoria habla por sí misma y también la ciudad se merece una gobernante como Clara Brugada y creo que va a ser una ciudad que va a seguir avanzando, como avanzó cuando López Obrador fue jefe de Gobierno, Marcelo, ahora Claudia Sheinbaum, Martí Batres, es la continuidad de un proyecto que se ha consolidado en la ciudad y ha dado resultados”.
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HCM