A Morena le tomó 18 horas aplicar la paridad en las nueve candidaturas a repartir para el relevo las entidades que se disputarán el año próximo. En ese lapso se encartaron y descartaron varios aspirantes y entre los inconformes estuvieron Ignacio Mier y Antonio Pérez Garibay, padre de Checo Pérez.
Con un criterio de última hora al reconocer el “esfuerzo” de las mujeres para posicionarse, Clara Brugada dio el campanazo sobre Omar García Harfuch, lo que de última hora metió a la competencia al chiapaneco Eduardo Ramírez; los perdedores podrán usar su pase dorado al Senado.
Desde las 9 de la mañana del viernes empezaron a desfilar los suspirantes para conocer su lugar en las encuestas; primero en privado se les informó de los resultados que, al final del día, terminaron con los malabares para cumplir con la designación de cinco mujeres a pesar de que solo dos ganaron la encuesta.
Ciudad de México parecía ser el vértice del que dependían las demás decisiones, pues el comportamiento y el apoyo a los punteros en los sondeos dieron color al dramatismo que parecía alcanzar su momento cumbre cuando el mariachi llegó al motor lobby del hotel, donde desde hacía 12 horas habían desfilado los aspirantes de Yucatán, Veracruz, Tabasco, Puebla, Morelos, Jalisco, Guanajuato y Chiapas, pero el color lo dieron los chilangos.
García Harfuch quedó en segundo lugar por el criterio de paridad en la capital, a pesar de alcanzar la tercera ventaja más amplia de las nueve encuestas levantadas, con una delantera de 13.8 puntos sobre Brugada y solo por debajo de 36.7 por ciento del tabasqueño Javier May sobre Yolanda Osuna y el 31.2 del yucateco Joaquín Díaz Mena sobre Verónica Camino.
Margarita González fue la única que desde las 6 de la tarde ya sabía que tenía la postulación de Morelos en la bolsa, puesto que había ganado la encuesta por amplio margen. Ni siquiera la veracruzana Rocío Nahle tuvo esa tranquilidad pues su ventaja sobre Manuel Huerta fue de apenas ocho décimas.
Las mujeres que ganaron la postulación a pesar de haber ocupado el segundo lugar fueron la ex alcaldesa de Iztapalapa en Ciudad de México, Claudia Delgadillo en Jalisco, quien quedó por debajo de Carlos Lomelí por 5.3 puntos, y Alma Alcaraz en Guanajuato al quedar solo un punto detrás de Ricardo Sheffield.
A las 9 horas dio inicio la cita con los aspirantes; en la exposición privada se llevaron dos horas donde se daban tiempo para grabar la presentación completa de las dos encuestas espejo a cargo de empresas privadas y la elaborada por la Comisión de Elecciones de Morena. Después los punteros dieron un mensaje, hablando de unidad y del proyecto.
Luego desfilaron las siguientes entidades hasta que llegó la última: Ciudad de México, pero ya eran las 00:40 horas de hoy y todavía se convocó a la reunión con todos los punteros, la cual se llevó casi dos horas más. Todavía faltaba la conferencia para el anuncio oficial después de los cálculos políticos y matemáticos, que tuvo lugar a las 3:28 de la mañana.
Desde las 3 de la mañana comenzaron a salir del salón tres de los punteros, quienes se dirigieron a una sala de prensa llena de cámaras, micrófonos y reporteros, esperando que los demás plancharan su estado. Ahí lucían con rostros casi inexpresivos el poblano Alejandro Armenta, la veracruzana Rocío Nahle y el tabasqueño Javier May.
Horas antes, simpatizantes de Brugada, incluyendo un mariachi, ya la esperaban con pancartas, banderas y hasta batucada. Para entonces, el otro aspirante puntero, García Harfuch, ingresó por una puerta alterna para evitar cualquier encontronazo.
A su arribo, el ex secretario de Seguridad sí accedió a hablar con la prensa para dejar claro que respetaría la resolución del guinda respecto a la regla de paridad de género: “Siempre vamos a acatar las reglas del partido y la paridad", aseveró.
Minutos después llegaron el ex subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, y la procuradora ambiental capitalina, Mariana Boy; antes, lo había hecho el diputado federal Miguel Torruco.
La pregunta clave
La regla que la ex corcholata Marcelo Ebrard peleó que definiera a la candidatura presidencial se replicó para repartir las gubernaturas y la Jefatura de Gobierno. La persona que ganó la pregunta “¿a quién preferirías como candidato o candidata de Morena?” fue decisiva, con un de tres de los 10 puntos totales.
Sin importar si en el resto de la encuesta perdieron todo, con una gran o mínima diferencia, quien fue más votado en esa pregunta llegó a la final. Y los aspirantes que ganaron en conocimiento, honestidad, compromiso y cercanía con Morena, si no fueron elegidos en esa pregunta, perdieron a un paso de obtener la candidatura.
La mayor sorpresa fue en Veracruz, con Rocío Nahle, quien se pensaba que sería la mujer que arrasaría en las encuestas y no fue así. En la pregunta de cuánto la conocen los veracruzanos la ex funcionaria federal quedó en tercer lugar, pues fueron más conocidos Eric Cisneros, secretario de Gobierno, y Manuel Huerta, delegado de programas sociales.
En la encuesta de Morena apenas le ganó por cinco décimas a Manuel Huerta en honestidad, mientras que 3.5 por ciento más consideró que el delegado sería mejor candidato que ella y 3 por ciento más dijo que votaría más fácilmente por él.
Pero en la pregunta decisiva, Nahle le ganó apenas con ocho décimas a Huerta, 16 puntos sobre 15.2, el único rubro que le dio la precandidatura.
Esta pregunta fue clave para Morena porque puso en perspectiva la competencia real e interna entre los perfiles; así se planteó para la contienda presidencial: ponderar por igual aspectos como el conocimiento no permitiría elegir a la persona más competitiva. Algunas personas podrían ser más conocidas por el cargo o por alguna coyuntura, pero el cara a cara podría dimensionar las preferencias más claras directamente hacia Morena.
En varias entidades, esta pregunta quedó muy cerrada, por lo que aplicar la regla de paridad fue más sencilla, pues las mujeres garantizarían el mismo nivel de competencia que el hombre.
Por ejemplo, en Guanajuato los resultados fueron más cerradas con apenas un punto: Ricardo Sheffield obtuvo 24.4 puntos y Alma Alcaraz 23.4.
En contraste con entidades donde la diferencia hizo imposible quitarle los espacios a los hombres, como Tabasco, donde Javier May fue seleccionado por 51.2 frente a 14.5 de Yolanda Osuna o Yucatán con Huacho Díaz Mena con 40.1 frente a 8.9 de Verónica Camino Farjat.
Es el caso también de Puebla, donde Alejandro Armenta obtuvo 22.3 e Ignacio Mier 21.4 frente a Claudia Rivera con 11.9; la entidad poblana fue la única donde dos hombres obtuvieron los dos primeros lugares, lo que tampoco permitió darle paso a una mujer.