Claudia Sheimbuam afirmó que uno de sus objetivos es detener los asentamientos irregulares pues se estima que el suelo de conservación pierde entre 250 y 500 hectáreas.
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“La idea es que ya no haya, el objetivo es parar esto y lo vamos hacer gradualmente, con una política distinta, obviamente lo que están en riesgo hay que reubicarlos”.
Luego de encabezar el arranque de la “Entrega de ayudas del programa Altépetl 2019”, en el Parque Ecoturístico San Bernabé Ocotepec, en la alcaldía Magdalena Contreras, refirió que ya se anunciará lo que están trabajando junto a las secretarías de Desarrollo Urbano y Vivienda, así como la de Medio Ambiente y algunas alcaldías.
“Insisto, el objetivo es parar los asentamientos irregulares porque en realidad no se ha podido contener ese crecimiento y ahora lo debemos hacer”.
Respecto al programa dijo que está dividido en dos ejes y para lo cual se destinarán mil millones de pesos con el objetivo de proteger los bosques de la Ciudad de México, las tierras agrícolas, el origen, el náhuatl, a los pueblos originarios y los servicios ambientales “que estas bellísimas tierras”, brindan al Valle de México.
“El primero se llama Cuautlán (Conservación del bosque), en donde las propias comunidades y ejidatarios eligieron a comuneros que quisieran dedicarse a cuidar el bosque, para que por primera vez haya Brigadas Integrales de Cuidado de los Bosques, quienes recibirán un apoyo de seis mil pesos mensuales para desarrollar actividades en las 35 mil hectáreas de bosque en la ciudad”.
Estas, comentó, serán vigilar, cuidado el bosque, evitar incendios forestales, en su momento colecta de semilla de los árboles y apoyar en la reforestación y para lo cual tendrán un técnico forestal que los ayudará con el saneamiento forestal, equipamiento (uniformes adecuados, guantes, herramienta y camionetas), “vamos a probar cómo funciona esto, y si lo hace, se incrementará”.
La otra parte del programa se llama “Centli” (maíz), al que se le darán 400 millones de pesos (de los mil millones de pesos) para el suelo de conservación, para los productores agrícolas o productores agropecuarios.
“Se busca que sea un apoyo por parcela; también con extensionistas de tal manera que haya apoyos de ingenieros agrónomos y biólogos, que los acompañen en el proceso de cultivo, y que los proyectos no se abandonen, además de conservar nuestro maíz criollo”.
Manifestó que hay otra parte más pequeña que tiene que ver con el apoyo para el rescate de la cultura, porque en el sur de la ciudad, las comunidades agrarias están vinculadas con los pueblos originarios.
En tanto, Columba López, directora general de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural de la Sedema, informó que hasta ahora se han aprobado para su ejecución 224 millones 181 mil 324 pesos de los mil millones.
“Para el componente Centli se dispersarán 17 millones 814 mil 213.19 pesos a partir de este lunes y para el Cuautlán 16 millones 21 mil 576.16 pesos, ahora estamos en la firma de convenios con los beneficiarios y al momento se han signado 600”.
Afirmó que las tarjetas de pago para los brigadistas ya están entregadas y en la semana harán lo propio, y para la parte productiva también habrá 600 convenios con igual número de tarjetas.
“Los recursos para lo que se está destinando ahora el apoyo es para las áreas comunitarias destinadas para la conservación y la retribución de los servicios ambientales a 115 personas”, aseguró.
Agregó que para la prevención y control de incendios, a 439 personas; protección de caminos, sederos vía verde recolección de basura y chaponeo de áreas verdes en 30 mil 400 metros lineales de la cicliovía, para 207.
Programas de manejo comunitario, del manejo forestal y reordenamiento de territorio ecológico, 16; protección y restauración de los recursos naturales, 5; Sanidad forestal, 66; vigilancia ambiental capacitada, 86, limpieza y mantenimiento barrancas, 57, vivero forestal, 78.
Además, hubo 225 personas que acudieron a las audiencias públicas y fueron contratadas por la unidad técnica operativa, y se incorporaron 100 asistentes técnicos, que llegaron a través de una convocatoria pública y fueron evaluados con exámenes a través de la FAO.
EB