Luis Donaldo Colosio Murrieta, con su visión de un México más justo y equitativo, probablemente sería una figura destacada en el panorama político actual.
Para quitarnos la duda, le preguntamos a la Inteligencia Artificial cómo se vería el ex candidato presidencial del PRI si estuviera vivo hasta nuestros días. Esto fue lo que nos respondió.
¿Quién fue Luis Donaldo Colosio?
Luis Donaldo Colosio Murrieta nació el 10 de febrero de 1950, en Magdalena de Kino, Sonora. Estudió Economía en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, de desarrollo regional en la Universidad de Pensilvania, y de Economía Regional y Urbana en el Instituto Internacional para el Análisis de Sistemas Aplicados de Viena.
Fue un reconocido profesor en el Colegio de México, en la UNAM y en la Universidad Anáhuac; y siempre mostró un especial gusto por la poesía, el canto y la declamación.
En 1979 ingresó al PRI, donde inició una importante trayectoria: en 1985 fue diputado federal por Sonora, y dos años más tarde, oficial mayor del Comité Ejecutivo Nacional del PRI; para 1988 obtuvo una senaduría por Sonora y ese mismo año asumió la presidencia del partido.
Durante su dirigencia en el PRI, centró sus iniciativas en la organización territorial, revalorizando la figura del ciudadano como protagonista de la vida del México contemporáneo.
Con el triunfo electoral de 1992, fue designado secretario de Desarrollo Social, cargo al que renunció en 1994 al ser postulado candidato a la Presidencia de la República.
El 23 de marzo de 1994, en un evento de campaña en Tijuana, el candidato fue asesinado. Y aunque el ciudadano Mario Aburto confesó haber sido responsable de la acción, hasta ahora el caso sigue inconcluso.
¿Quién mató a Colosio?
El 23 de marzo de 1994, Colosio dirigió un mensaje ante una multitud en Lomas Taurinas, Tijuana, en el estado de Baja California.
Instantes después de su pronunciamiento, caminó entre la gente, pero recibió dos disparos, uno en la cabeza y otro en el abdomen.
Ese mismo día, Mario Aburto fue detenido, acusado de matar con una pistola calibre .38 a Luis Donaldo Colosio. En su momento, la administración del ex presidente, Carlos Salinas de Gortari, creó la Fiscalía Especial para el Caso Colosio, en la que el 21 de octubre de 1994, la fiscal Olga Islas de González Mariscal logró una sentencia de 45 años contra Mario Aburto.
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¿Cómo se vería Luis Donaldo Colosio actualmente según la IA?
Imaginándolo en nuestros días, podríamos ver al político como un líder que combina experiencia con un enfoque progresista, continuando su misión de transformación y lucha contra la desigualdad.
Para este 2024, Luis Donaldo Colosio tendría 73 años, a poco más de un mes de cumplir los 74, y conservaría esa icónica sonrisa amigable que lo caracterizaba.
Antes y durante su campaña presidencial de 1994, Colosio demostró ser "un hombre de bien, de principios, de profunda convicción democrática, de alta consciencia social, y un hombre de Estado", de acuerdo con el PRI.
¿Cuál fue el impacto de Colosio en la política mexicana?
Colosio dejó una huella imborrable en la política mexicana. Su campaña presidencial en 1994 fue un momento de esperanza para muchos, prometiendo reformas significativas y un enfoque más inclusivo en la política.
Su discurso en el Monumento a la Revolución, donde criticó abiertamente la corrupción y la desigualdad, sigue resonando como un momento clave en la historia política de México.
“Veo a un México con hambre y sed de justicia, un México de gente agraviada por las distorsiones que imponen a la ley quienes deberían servirla. De mujeres y hombres afligidos por abuso de las autoridades o por la arrogancia de las oficinas gubernamentales…”, dijo en aquel momento.
Colosio sabía conquistar a la multitud a través de sus palabras, como lo hizo el día de su asesinato, cuando impulsó a la población mexicana a reformar el poder.
"Es la hora de la reforma del poder, de construir un nuevo equilibrio en la vida de la República; es la hora del poder ciudadano. Es la hora de la democracia, de hacer de la buena aplicación de la justicia el gran instrumento para combatir el cacicazgo, para combatir los templos del poder y el abandono de nuestras comunidades.
"¡Es la hora de la nación! ¡Es la hora de reafirmar valores que nos unen. ¡Es la hora del cambio con rumbo seguro, para garantizar paz y tranquilidad a nuestros hijos! ¡Es la hora de ser fuertes todos, haciendo fuerte a México!".
EHR