Cada vez que compra el mandado, Rebeca Villagrán salva la vida de alguna tortuga o delfín en el mar, que no se ahogará con una bolsa de plástico, porque ella usa bolsas reciclables.
En una red de las de antes, que le regaló algún candidato que ya nadie recuerda, carga todo lo de la despensa.
Aunque le digan que es gente antigua, ella usa sus redes.
Sabe que una bolsa de plástico tarda unos 500 años en descomponerse. Es decir, que si Hernán Cortez y Cuauhtémoc hubieran usado alguna, todavía existiera.
Por eso se instituyó el 3 de julio como Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico.
Cada persona utiliza en promedio unas 230 bolsas de plástico al año, significa que andan rodando por el mundo más de 500 billones de bolsas de plástico, que al no reciclarse representan una grave amenaza para océanos y especies marinas, principalmente. Mejor papel.
Si quiere colaborar, siga estas recomendaciones:
- Nunca salga de casa sin una bolsa de tela plegable de tela.
- Si no lleva bolsa y le ofrecen una de plástico en la tienda, piensa realmente si la necesitas. Quizás la compra quepa en el bolso, cartera o mochila.
- Reutilice las bolsas que tenga en casa, para las compras o para tirar basura.
- Cuando las tire, envíelas en un contenedor de los plásticos.
El plástico no se degrada con facilidad, y en los 5 siglos que permanece en los ecosistemas interactúan con hasta 700 especies marinas, ocasionan la muerte de 100 mil mamíferos marinos al año y de un millón de aves.
Cada bolsa de plástico que no usamos, salva una vida en el mar.