Activistas, que tenían tomadas las oficinas de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), en Ciudad de México, abandonaron durante la madrugada las instalaciones ubicadas en la carretera Picacho-Ajusco No. 238, en la colonia Jardines en la Montaña, alcaldía Tlalpan. Hasta el momento se desconoce si tuvieron respuesta a sus demandas.
Las activistas, encabezadas por “Kika Flores”, tomaron las oficinas de la CNDH ayer, para exigir justicia por las agresiones que sufrieron hace poco más de un año en instalaciones del mismo organismo en el municipio de Ecatepec, Estado de México.
El grupo acusa que fueron agredidas y trasladas al Centro de Justicia de Atizapán, de la Fiscalía del Estado de México, sin que hasta el momento haya responsables por las lesiones ocasionadas a varias de sus integrantes,
En sus demandas, pidieron una audiencia con la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, para solicitar la destitución de Francisco Estrada, Bianca Trujillo y Paolo Guissepe, por los actos de represión de los que señalan que han sido víctimas.
Kika Flores denuncia que fue reprimida durante una manifestación contra la Fiscalía del Estado de México el 11 de septiembre de 2020, donde exigía justicia por la muerte de su hija Fátima Chacón Flores, de 16 años.
Actualmente, el edificio de siete pisos y planta baja está “resguardado” por el personal de vigilancia, se observan parte de los daños que se registraron durante la toma; como la ruptura de cristales, pintas y destrozos al equipo de cómputo.
Al momento no se reportan personas lesionadas y en el transcurso de la mañana se espera un balance de los daños ocasionados por las activistas. La puerta principal se encuentra cerrada y los vidrios rotos no han sido retirados.
AS