En la tercera edad dependen de las remesas

Uno de los sectores más vulnerables de nuestra sociedad, son sin duda, los adultos mayores que en muchos casos, no tienen acceso a una pensión o a un ingreso que les permita llevar una vejez digna y que a menudo se ven envueltos en situaciones de violencia, abandono y discriminación.

“En el estado de Jalisco, estamos teniendo poblaciones que están quedando sin gente por la migración y se ha visualizado cómo hay un doble fenómeno de concentración de la población en algunos lugares y un fenómeno de despoblamiento en otros, que tiene que ver con las migraciones, tanto internas como internacionales y también a que en estas poblaciones que tienen poco número de habitantes es en donde hay un mayor número de adultos mayores” visibilizó Patricia Noemí Vargas Becerra, jefe del Departamento de Ciencias de la Salud del Centro Universitario de Los Altos, quien también hizo énfasis en el hecho de que algunas poblaciones del estado, este fenómeno se debe a que mujeres y hombres jóvenes y jóvenes adultos, partieron de sus lugares de origen en busca de una mejor oportunidad en los Estados Unidos.

Es precisamente este sector, quien participa en una dinámica de reordenamiento familiar en el que se puede observar que se ha establecido una articulación en la que las remesas que llegan a las familias de estos, sirven también para la manutención de sus familiares de la tercera edad: “Lo que tenemos aquí, es que quienes mandan el dinero para la sobrevivencia de estos adultos mayores en estas poblaciones, pues son los migrantes que están en Estados Unidos y que están enviando remesas”, recalcó.

Para ejemplificar este hecho, Alejandro Canales Cerón, profesor investigador del Departamento de Estudios Regionales del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) encontró una semejanza con la película mexicana Como Agua para Chocolate, en la que una de las hijas se queda a cargo del cuidado de los padres, dato relevante, porque ya no es sólo que una persona queda a cargo del cuidado de los padres, sino que otro integrante se queda a cargo de los hijos de quien ha migrado a otro lugar formando una cadena de cuidado que permite, por un lado que el migrante vaya y pueda trabajar allá y que con sus remesas alguien acá, viva cuidando a la familia estableciendo una situación de relación deslocalizada.

Pero no todos corren con la misma suerte a causa de que en un sinfín de casos, la relación familiar con quienes ya se encuentran viviendo la vejez, está dañada y podría llegar a ser motivo de abandono, violencia, humillación y desentendimiento; se ha buscado en diversas ocasiones endurecer los castigos para quienes incurran en este tipo de prácticas generando un cuestionamiento ¿En dónde queda el Estado que tiene que garantizar una serie de derechos para el adulto mayor?

Canales relató que en Chile se estableció esa ley en la que la familia debe hacerse responsable de los adultos mayores, explicando que no todos están en las mismas condiciones y por otro lado se pregunta en dónde queda la responsabilidad del Estado.

“Una cosa es decir, ‘te responsabilizo a ti’ pero también debo darte entonces, la opción de no obligarte a hacer eso, porque los lazos familiares no son obligatorios en ese sentido y ahí entra una situación muy dura que tiene que ver con derechos humanos; en el caso del niño siempre se pone por delante el interés superior del niño pero en el caso del adulto mayor ¿cómo opera eso? el interés superior del adulto mayor es tener una vida y una vejez digna” contrastó. 

Por su parte la Noemí Vargas, visualizó que actualmente los adultos mayores cuentan con una serie de apoyos que tienen qué ver con un asunto intergeneracional; tienen familias con un mayor número de personas que habitan en el hogar, tienen hijos que los cuidan y tienen otro tipo de ayuda.

“Si en los 70 cada familia tenían en promedio 6 miembros, es decir, las familias eran mayores en comparación con las familias de hoy en día que tienen 2 niños por familia; cuando estos padres sean mayores no van a tener el mismo tipo de apoyos intergeneracionales que tienen los adultos mayores de hoy”, y adicionó: “Cuando el adulto mayor tuvo una etapa productiva, donde le debieron de haber dado las condiciones para que su futuro estuviera asegurado y durante esa vida productiva ¿se le garantizaron todos sus derechos para que su futuro tuviera eso? ¿O fue la familia la que no le garantizó tener un trabajo digno?”.

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SRN