Elementos del Ejército y de la Policía de Hidalgo ampliaron el perímetro de acordonamiento en la zona de la explosión de una toma clandestina en Tlahuelilpan.
Los agentes de seguridad comenzaron a colocar este cerco, luego de que durante todo el día, decenas de familiares de víctimas recorrieron el área del siniestro en búsqueda de algún indicio de algún pariente que a la fecha no han podido localizar.
Los militares y policías estatales clavaron en la tierra palos y ramas para amarrar los cordones color amarillo y rojo con la leyenda “Precaución”, aunque hasta el momento los pobladores continúan incluso dentro de la zanja.
Elementos de seguridad no quisieron responder si se seguirá permitiendo al acceso a la zona con este nuevo cerco.