Desde el 2007, el trabajo que el colectivo León Gay hace principalmente con los jóvenes además de la realización de las pruebas para la detección del VIH, es un acompañamiento emocional y de ser necesario legal para las personas que son detectadas ceropositivas.
El colectivo encabezado por Fidel Negrete surgió a raíz de que en León se iba a llevar a cabo la Décima Conferencia Nacional sobre Sida y hacía falta más visibilización en la entidad sobre el tema.
Empezaron a trabajar como un grupo de base comunitaria junto a otros colectivos de la localidad y nacionales como colectivo Sol y Trans Leonas, el último especial para atender a chicas trans, hasta que se vieron en la necesidad de constituirse legalmente en el 2009.
“Empezamos a trabajar un proyecto que se llamó Vida Digna que era para la reducción del estigma y la discriminación vinculado a VIH y a homosexualidad y dentro de ese proyecto se trabajó con otros grupos que tampoco estaban constituidos aquí en León, pero que trabajaban el tema del VIH”, comentó
Sin embargo con la llegada de la pandemia la realización de las pruebas para detectar el virus ha sido más complicada, pues de las 500 que practicaban al año, ahora sólo pueden realizar 250, es decir, un 50 por ciento.
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En la actualidad, atienden a personas sin importar su orientación sexual, aunque las características más destacadas son hombres desde los 15 hasta los 49 años de edad, en su mayoría homosexuales.
“Tenemos un grupo de autoapoyo que por época de pandemia no continuó, pero seguimos en contacto con las personas que integraban el grupo, tenemos banco de medicamento de retroviral, en caso de desabasto si contamos con ese medicamento pues apoyamos a las personas, también la promoción de la prueba de VIH y de sífilis”, comentó.
El activista comentó que cuando una persona resulta positiva se canaliza al servicio de salud que le corresponde, ya sea IMSS, ISSSTE o la Secretaría de Salud.
En el caso de la asesoría legal dijo que se les brinda porque hay situaciones en que algunas personas tienen problemas con el servicio o el abasto de medicamentos por parte de las instituciones.
En lo que refiere el grupo de autoapoyo es para trabajar y asumir el VIH acompañado de las experiencias de sus compañeros, además de apoyo psicológico, convivencia entre pares y tocan temas como la sexualidad positiva, así como resolver las preguntas para las personas que tienen poco tiempo con el diagnóstico que pueden ser asesorados por los que ya tienen más tiempo conociendo la enfermedad.
PCQG