Personas dedicadas a la confección de trajes de San Juan Diego e inditas procedentes de San Gabriel Chilac, instalaron sus puestos en la calle 3 de esta ciudad, en espera de ventas, actividad que desde el 2019 no habían realizado.
Irma Sánchez Rosales, dijo que varios artesanos salieron de sus hogares para retomar esta actividad que estuvieron preparando desde el segundo semestre de este año.
Tomando todas las medidas sanitarias salió de su hogar para iniciar la venta en Tehuacán, trabajo que en su familia es una tradición desde hace cuatro generaciones, porque bordan blusas para las niñas al igual que las camisas de manta para niños, además de confeccionar calzones de manta y faldas de tela cambaya, actividad que ella realiza desde hace 40 años.
En los lienzos de tela blanca dibujan flores que después bordan a mano, eso se ha convertido en un atractivo para las personas que siguen valorando este trabajo artesanal, a pesar de la incursión que han tenido los bordados con máquina.
La hechura de estas prendas, representan una actividad importante para cientos de familias de San Gabriel Chilac, que no solo venden en esta ciudad, sino desde finales de noviembre viajan al sureste, centro y norte del país para ofrecer estos tradicionales trajes que los ocupan para vestir a las niñas y niños este 12 de diciembre.
Pero la artesanía de este tipo de ropa no solo se queda en el territorio nacional, también la envían a Nueva York, San Diego California, entre otras ciudades de la Unión Americana, donde migrantes compran los trajes para vestir niños este 12 de diciembre o en las pastorelas.
Sánchez Rosales comentó, que hasta estos días no han tenido ventas importantes y lo atribuyen a a lo débil que aún está la economía en muchas familias por la pandemia del coronavirus, "porque la gente llega a los puestos y pregunta los precios de los trajecitos y se retira, yo creo que no les alcanza el dinero o tienen miedo que sus hijitos al llevarlos a la iglesia vayan a enfermar".
Esperan que entre el 10 y 12 de este mes tengan mejores ventas, sobre todo porque ahora las iglesias estarán abiertas para recibir a los peregrinos.
CHM