Artesanos de la comunidad de Cuauhtamazaco del municipio de Cuetzalan del Progreso, Puebla, fabrican cubrebocas con los estándares sanitarios para el uso del sector salud, mismos que están bordados en manta y con filtro de tela, cuyos diseños enaltecen la cultura de la región. Además de su distribución a nivel nacional, ya lograron exportar mil piezas a Estados Unidos y Francia.
Así lo da a conocer el representante de la Casa Mazatzin, Pedro Martín Concepción, un artesano textil nacido en el año 1985 en una cuna indígena de la comunidad de Cuauhtamazaco, “que significa Monte del Venado, en la junta auxiliar de San Andrés Tzicuilan del citado municipio.
“Son cubrebocas artesanales, bordados en manta con hilos de algodón y llevan un filtro de tela de la mejor calidad. Este filtro lleva un tratamiento y aparte le colocamos otro que es un portafiltro, que es un pedazo de tela aparte. Previamente se lava la manta y de ahí se corta por unidad, se le corta el forro, que es el filtro de algodón, se confecciona con máquina y se le agrega la liga”.
Asegura que se pueden lavar más de 50 veces y además evitan la contaminación, ya que no son desechables porque están hechos de puro algodón.
Añade que fabrican piezas con dos capas para la población en general o de tres capas si es que se los solicitan para el sector salud.
El propietario de la Casa Mazatzin narra que alrededor de 100 personas los visitaban cada fin de semana para hacer un recorrido dentro del taller y la tienda de artesanías donde se elaboran rebozos, bufandas, blusas tradicionales, blusones, entre otras piezas.
Apunta que la falta de ingresos por la venta de ropa artesanal los hizo idear una nueva forma de generar trabajo para los pobladores de la comunidad, la cual está ubicada a 6 kilómetros de Cuetzalan.
“Desde hace dos meses por la pandemia dejamos de recibir turistas. Todos nos cancelaron porque trabajamos con diseñadores, proveedores y clientes fijos. Todos nos pidieron dejar los pedidos que había en puerta y por eso empezamos a realizar los cubrebocas”.
Cuenta que laboran desde el 2010 cuando instalaron una casa artesanal y ha tenido una evolución con la cual han logrado ganar más de 10 premios nacionales.
Pedro Martín informa que son 30 los artesanos, 20 mujeres y 10 hombres, todos ellos hablantes del náhuatl, quienes confeccionan los cubrebocas con diferentes bordados.
“Estamos agarrando los elementos de la blusa tradicional, que tiene la inspiración de la fauna, de la flora de la Sierra Norte de Puebla. Estamos bordando palomas, flores, piñas, elotes, cocoas, serpientes y estamos bordando con el color que nos pidan los clientes”.
Resalta que en todas las piezas ocupan los cuatro colores tradicionales de la región, que son el morado, rojo, blanco y amarillo.
“En Cuetzalan, todas las mujeres bordan sus blusas tradicionales, algunas para venta al turismo y otras para su uso particular, como ornamento o para ritualidades o fiestas importantes”.
Por último, comenta que por sus diseños y trabajos han acudido a diferentes eventos fuera del país, por ejemplo, en el 2012 asistieron a la Feria Internacional de Turismo (Fitur) en España, donde hicieron una demostración de telar en cintura y bordado.
mpl