Artesanos de Chapulco, San Antonio Cañada y algunas poblaciones de la mixteca poblana, se convirtieron en los proveedores de palmas y otras figuras religiosas que este domingo fueron puestas a la venta en los atrios de iglesias para que los feligreses sigan con la tradición de la bendición de Ramos.
Para María del Carmen Torres Hernández artesana con más de 30 años de dedicarse a esta actividad, la Semana Santa es una temporada en la que esperan para vender imágenes que hicieron con tallo de trigo o velillo, materiales que desde niña teje con las enseñanzas de sus padres que complementaban sus quehaceres con la artesanía.
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Son tres generaciones que se dedican a este trabajo manual, que requiere de una preparación de material y posteriormente trabajarlo con la delicadeza en cada una de las figuras para que tenga forma y colores atractivos a la vista de los consumidores.
Los ramos con las tradicionales palmas son complementados con plantas medicinales como manzanilla o romero, que muchas personas lo utilizan para curar males estomacales y las de costumbre que hay, son para ser quemadas cuando hay lluvias intensas o después de un sismo, también hay quienes al paso de un tiempo las queman y sus cenizas son esparcidas en sus hogares como una protección.
Rosalina Ramírez Celestino, representante de un grupo de artesanos de Chapulco, dijo que, al contar con la anuencia de los sacerdotes, los artesanos de ese lugar se instalan desde el sábado en los atrios de las iglesias para iniciar con la venta de sus palmas y demás artesanías que tienen exclusivamente para esta temporada.
En Chapulco son más de 30 las familias que se dedican a esta actividad, muchos venden en esta región, pero otros más viajan a Tijuana, Monterrey, Veracruz, Ciudad de México, entre otros lugares donde permanecen una semana para ofrecer las artesanías de esta temporada.
Este sector artesanal espera tener buenas ventas a pesar del aumento que aplicaron a las artesanías, porque los insumos aumentaron en un 30 y 40%, no solo los materiales naturales que emplean, sino las aplicaciones que ocupan para darle más vista a las figuras que pusieron a la venta y que el precio más caro que llegaron a tener es de 15 y 20 pesos.
AAC