Tortilleros y molineros de distintas organizaciones, y dueños de pequeñas cadenas de tortillería, acordaron llevar a efecto el incremento de un peso más por kilo de tortilla a partir del próximo jueves 9 de agosto.
Destacaron que el costo de la harina de maíz había ya aumentado el segundo mes de este año, pero antes de que se cumplieran seis meses, la materia prima de los expendedoras de tortillas, se incrementó nuevamente, llegando a valer en este momento 500 pesos más de lo que costaba al iniciar 2018.
Mencionaron que tan sólo el saco les cuesta, a los productores de tortilla, 247 pesos, y en cuanto al precio del agua para sus procesos de elaboración, ese recurso se los pasan en tarifa industrial y no comercial.
Así mismo indicaron los molineros y tortilleros mexicanos que ellos han invertido un 20 por ciento de su presupuesto en el pago de agua, pero además el gas, energético que emplean para mover toda su maquinaria, una pequeña línea de producción, es otra de las inversiones en las que se va buena parte del capital de esas pequeñas empresas, por lo destacaron que se les hace imposible no aumentar el costo del producto.