El acuerdo entre la empresa Volkswagen de México y su sindicato de trabajadores para otorgar un aumento de 5.5 por ciento directo al salario y un uno por ciento al fondo de ahorro, brinda estabilidad y certeza a la industria del estado de Puebla.
Anselmo Chávez Capó, investigador de la Facultad de Administración Financiera y Bursátil de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), explicó que el incremento al salario busca apoyar a los trabajadores ante la pérdida del poder adquisitivo y, al mismo tiempo, mantiene la estabilidad en la armadora.
Ante el entorno económico marcado por los efectos de la pandemia de la covid-19 y la falta de componentes como los semiconductores para el armado de autos, el especialista destacó que el acuerdo es positivo porque se evita la huelga en una de las empresas más importantes del clúster automotriz en la región.
Señaló que, aunque los trabajadores no alcanzaron su primera petición de un aumento salarial de dos dígitos, se mantiene el funcionamiento de la planta y de toda la cadena de suministro en materia de autopartes.
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En entrevista, Chávez Capó comentó que, en medio de las complicaciones económicas, los trabajadores de Volkswagen de México alcanzaron un incremento positivo y en las negociaciones del próximo año se podrán buscar mejores condiciones.
Destacó que el aumento de 5.5 por ciento directo al salario permite que la firma alemana pueda manejar sus costos de producción y no haya mayores complicaciones en sus operaciones para cumplir con el salario de los trabajadores.
“Se trata de un incremento que no encarece el costo de la transformación. Como todo incremento, pondrá mayor cantidad de dinero disponible. Eventualmente, ya tuvimos un incremento de los precios y el aumento al salario es para resarcir el incremento inflacionario que estamos sufriendo como consumidores y nos ayudará a recuperar un poco el poder adquisitivo”, destacó.
Para el especialista de la Facultad de Administración Financiera y Bursátil de la Upaep, el aumento acordado directo al salario es positivo y se traduce en un mensaje de estabilidad ante un entorno complicado.
“Es un incremento que permite trabajar con la recuperación de la pérdida del poder adquisitivo y la armadora y trabajadores buscan estabilizar los sueldos y ya el año que entra, se puede pensar en otra negociación.
Reconoció que, en la negociación salarial de este año, los factores que influyeron fueron la inflación y las complicaciones que se están viviendo ante los efectos de la pandemia de la covid-19 y problemas en los semiconductores que son clave para el funcionamiento de los autos.
Agregó que la inflación, es decir, el aumento de los precios está por arriba de lo esperado por el Banco de México; sin embargo, se estima que para 2022, se pueda estabilizar y regrese a los niveles de tres por ciento.
“El Banco de México considera que, a pesar de que llevamos cinco ciclos por arriba de la expectativa de la inflación, confía en que se va a detener el proceso inflacionario y que el año que entra estaremos regresando al nivel de tres por ciento”, finalizó Chávez Capó.
mpl