“El rostro de mi hija quien falleció hace seis años, fue el impulso para ingresar a la Academia de Policía municipal y no abandonar el camino y llegar a mi meta que es el día de hoy que me estoy graduando”, expresó Beatriz Moreno Hernández quien este martes fue parte de los 52 graduados de la Generación 33.
En entrevista con MILENIO Puebla, compartió que hace seis años falleció su hija, por lo que ella fue su mayor motor para formar parte de la Academia de Formación y Profesionalización Policial y a partir de este martes 20 de septiembre a la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
“Aunque ella no está presente, sabe que mi graduación está dedicada para ella, y como dijo mi compañero quien emitió el mensaje por parte de la Generación que cada vez que corríamos con el chaleco y las placas era muy pesado, pero más me impulsaba el ver el rostro de mi hija, y también mi hijo de 11 años que tengo, por lo que no me detuve, y tampoco flaquee y llegue a mi meta que es el día de hoy que me estoy graduando”, expresó con nostalgia en sus rostro.
Con nervios por recibir su certificado de graduación, narró que hubo momentos que el cuerpo ya no le respondía y que en ese momento tenía ganas de dejar todo y salir de la Academia.
No obstante, resaltó que al interior de ella una voz le decía que tenía que seguir adelante y terminar lo que se propuso desde el principio que fue ser policía municipal y cuidar de la población.
Ante esto, relató que fue difícil su incorporación a la Academia, pues cuenta con la edad límite, esta es de 40 años, por ello no la pensó dos veces e ingresó y este martes ha logrado concluir su meta que es graduarse.
La recién policía, explicó que el proceso de preparación fue duro, debido a que muchos los que se inscribieron, pero pocos lograron un lugar para ser cadete.
Agregó que son varios filtros que tienen que aprobar las personas que buscan ser policías, como es el examen de control de confianza.
Beatriz Moreno dijo que está lista para salir a la calle y ser policía de proximidad social y atender a los ciudadanos con calidad.
Puntualizó que fueron seis meses de preparación con mil horas de clases, con instructores a nivel internacional y nacional, a la par destacó que en las primeras horas como servidora actuará con profesionalismo para proteger a los ciudadanos.
Finalmente, comentó que está contenta por lograr esto y agradeció el apoyo de su familia y de su hijo de 11 años.
CHM