Después de casi siete horas de bloqueo total en la autopista Arco Norte por el asesinato de un opositor al basurero regional instalado en Atitalaquia, pobladores reabrieron la vialidad a la circulación, luego de acordar con el gobierno federal una mesa de diálogo para abordar la problemática en torno a la operación del inmueble.
La mañana de este lunes un grupo de pobladores que se oponen al basurero acudieron al plantón ubicado afuera del mismo para acordar las acciones que emprenderían en exigencia de justicia y a la vez el cierre del inmueble por las presuntas violaciones a la normativa ambiental; otro grupo se reunió en las inmediaciones del palacio de gobierno municipal, el cual mantienen tomado desde hace un mes para reforzar la protesta y planear las acciones que emprenderían.
Ambos grupos acordaron reunirse en el centro del municipio y de ahí partir hacia la caseta Atitalaquia de la autopista Arco Norte para bloquear los dos sentidos de la vialidad, como medida de protesta para ser atendidos por autoridades del gobierno estatal y federal. Por varias horas permanecieron en el lugar sin que los atendieran, hasta que arribaron tres funcionarios del Mecanismo de Protección para Periodistas y Defensores de Derechos Humanos, dependiente de la Secretaría de Gobernación para brindarles una orientación en torno a las acciones a emprender para evitar un nuevo incidente violento.
Diálogo con funcionarios
Funcionarios precisaron el ámbito de su competencia para evitar confusiones, pues indicaron que su labor es preventiva; el gobierno estatal, por su parte, ofreció a los pobladores atender a una comisión que se trasladara a Pachuca; no obstante, los pobladores se opusieron y exigieron que los funcionarios se trasladaran al sitio para escuchar ahí sus peticiones, lo cual no sucedió.
Con apoyo de funcionarios federales que se encontraban en el sitio, horas después acordaron con autoridades del gobierno de México que el próximo viernes se realizaría una mesa de diálogo para abordar el tema, por lo que accedieron a liberar la circulación, retirando los troncos, llantas, vehículos y ramas que habían colocado en los cuatro carriles de la vialidad, aunque advirtieron que el plantón en el ayuntamiento y en el basurero regional continuarían.
La protesta generó un intenso congestionamiento vial de varios kilómetros, lo que ocasionó molestia entre automovilistas y operadores de unidades de carga, quienes recriminaron a los manifestantes el bloqueo.
En el transcurso del día conductores de vehículos de carga y particulares protagonizaron episodios de discusión con los manifestantes al intentar pasar o darse la vuelta por el camellón para evitar continuar detenidos en el Arco Norte.