“Me gusta cuando me veo al espejo y miro a una mujer”

Con o sin el apoyo de la gente que la rodeada cuando era menor de edad emprendió su transición, ya que sentía que su verdadera identidad era la de una mujer.

Britany Mendoza habla de su proceso para aceptarse luego de su transición (Josefina Ruiz)
Josefina Ruiz
Guadalajara /

“Yo creo que también es difícil para los padres aceptarlo porque como dice mi mamá ‘naciste siendo niño. Yo vi a un niño cuando naciste, te vi crecer como un hombre’”, es como Britany Mendoza, una mujer trans de 35 años, describió el panorama que vive el núcleo familiar y la persona en el proceso de transición.

Ella nació en una familia conservadora bajo el nombre de José Miguel, pero a los 14 años de edad se reconoció como mujer trans.


Con o sin el apoyo de la gente que la rodeada cuando era menor de edad emprendió su transición, ya que sentía que su verdadera identidad era la de una mujer. “Yo me acepto desde que me maquillé y de vestirme como mujer, de aquí para adelante, y si tengo el apoyo familiar de amistades o de la gente no me importa”, dijo.

En México, las mujeres transexuales son las que viven mayor nivel de desigualdad y las que reciben mayor discriminación. El promedio de vida de una mujer trans en el país apenas es de 35 años de edad.

Desde que Britany se reconoció como una mujer trans se enfrentó a una sociedad machista y conservadora. “En su momento sí me daba depresión, lloraba sola en la casa, salía y ya te aventaban un botellazo, los cabrones te querían golpear y te sientes mal. Es cruel porque muchos a base de eso se suicidan, no tienen un respaldo, no tienen quien los apoye; sales en la calle y la sociedad te trata como mierda”, manifestó.

El Día Internacional de la Visibilidad Trans es una conmemoración anual que celebra la vida y es un espacio para hablar de la discriminación que se ejerce hacia las personas trans en el mundo. Para Britany Mendoza el que se conmemore esta fecha es un gran avance que permitirá que se fomente de poco a poco en las futuras generaciones el respeto hacia las personas de la población LGBTQ.

“Yo he visto todos los procesos de discriminación, hasta la aceptación de ahorita, y me sorprende y sabes que los que vienen no van a pasar lo mismo que tú ya sufriste”, dijo Britany con la voz entre cortada.

Hace aproximadamente un año y medio acudió al Registro Civil de El Salto y comenzó su trámite para cambiar su acta de nacimiento.

En la actualidad es autosuficiente, resiliente y se dedica a la barbería. Lo más importante, dijo, es que le gusta lo que ve cuando se mira al espejo y se reconoce como mujer trans.

SRN



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