Calle 5 de Mayo se convierte en pueblo fantasma ante coronavirus

Locales colocaron comunicados con la frase: “¡Te vamos a extrañar!, por covid-19 cerramos”.

La calle 5 de Mayo se convierte en un pueblo fantasma ante la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus. (Andrés Lobato)
La calle 5 de Mayo se convierte en un pueblo fantasma ante la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus. (Andrés Lobato)
Angélica Tenahua
Puebla /

Como si se tratara de un pueblo fantasma, es como luce la calle 5 de Mayo, una de las avenidas más transitadas por el peatón y el turista en Puebla, pues los locales que le dan vida y colorido, pero sobre todo desarrollo económico, bajaron sus cortinas, a partir del 2 de abril por el coronavirus.

Durante un recorrido realizado por Milenio Puebla, se corroboró que pocos negocios se encontraron abiertos y estos fueron de los giros de comida, por lo que en la mayor parte de los establecimientos las cortinas estaban cerradas.

En el recorrido que comenzó en la calle 5 de Mayo y Avenida Reforma, los locales se encontraron cerrados, con un ambiente de desolación, pues en esta avenida todos los días se genera una importante actividad económica.

Los comercios que se encuentran cerrados en su totalidad son de marcas de ropa como Cuidado con el Perro, Bosco y zapaterías, tal es el caso de Ozono, negocio que colocó un letrero informando a los clientes que por la contingencia sanitaria permanecerá cerrado hasta el 30 de abril.

El oficio cuenta con la leyenda de “¡Te vamos a extremar! Debido a la alerta sanitaria emitida por el gobierno federal, mantendremos cerradas nuestras tiendas temporalmente, con el fin de cuidar el bienestar y la seguridad de nuestros colaboradores y clientes”.

“Seguimos monitoreando la situación para tomar las medidas necesarias y que nuestras tiendas sean espacios limpios seguros para todos. Desde casa puedes disfrutar de las nuevas colecciones y tendencias en el mundo del calzado”.

Asimismo, con asombro, la poca gente que caminaba por esta calle leía los comunicados de todas las tiendas y locales.

Lo mismo sucedió en la Plaza Victoria, que en total silencio se encontró el jueves, con la apariencia de un escenario de película, pues la actividad no existe en la zona.


mpl


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