Las fiestas decembrinas suponen ser un tiempo de celebración, paz y armonía, pero este fin de semana a los habitantes de Pachuca también les trajo obras publicas que generan descontento y caos vial, además de muchos retrasos y desesperación para quienes buscan salir de la ciudad con rumbo al sur.
La cercanía que mantiene Pachuca con el Estado de México y la CDMX, así como los días de asueto que brindan algunas empresas y entes de gobierno, permiten que muchos de los habitantes de la Bella Airosa pretendan visitar la capital del país en estas fechas, sin embargo la Secretaría de Obras Públicas y Ordenamiento Territorial (SOPOT) de Hidalgo, decidió entorpecer los planes de muchos hidalguenses que pretendían salir de la capital del estado hacia aquellos rumbos, pues desde el pasado 26 de diciembre y hasta el 29 del mismo mes estarán interviniendo la vialidad principal de la ciudad, la carretera Pachuca-México, para hacer trabajos de mantenimiento al asfalto de dos carriles de esta arteria vehicular.
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Los rostros que se muestran en los conductores de los diferentes vehículos no esconden su frustración pues a lo largo de cientos de metros de esta vialidad federal parece un estacionamiento debido a los cientos de automóviles, autobuses y unidades de transporte público que buscan y en el caso de algunos, necesitan salir de la ciudad.
Ante esta situación algunos elementos de la SOPOT, así como de la Policía Estatal buscan desviar la circulación para mitigar la problemática, pero resulta insuficiente, pues aunque indican a los conductores qué vías alternas usar, la necesidad de muchos y la gran cantidad de vehículos hace prácticamente imposible que se tenga una circulación adecuada.
Dos carriles de la vialidad permanecerán cerrados hasta el domingo 29 de diciembre, fecha en la que pretenden concluir estas labores de reencarpetado asfáltico, sin embargo esa no es la raíz del problema, pues de cada 10 autos que circulan por dicha zona, ocho transportan únicamente a una persona, hecho que reflejo la falta de un transporte eficiente en la ciudad, ya que los pachuqueños prefieren mantener un automóvil, o en algunos casos más de uno, para solventar sus necesidades de transporte, y así generando un colapso impresionante cuando alguna vialidad es intervenida.
El problema de fondo de la movilidad en Pachuca se mantiene ante una nula oferta de transporte que pueda atender las demandas de toda la población, además de contar con calles y avenidas en pésimo estado que parecen nunca estarán al 100 por ciento concluidas.
Los privilegiados automovilistas no son los únicos afectados por esta situación, pues el sistema de transporte colectivo Tuzobús mantiene retrasos en todas sus rutas, lo cual ha afectado a miles de usuarios, para quienes el periodo de espera cercano a los cinco minutos para poder tomar una de las unidades se ha extendido a más de 20.
De igual forma el transporte convencional se ha visto afectado pues algunos taxistas prefieren no llevar a sus pasajeros a esta zona de la ciudad, además en caso de hacerlo buscan cobrar una cuota excesiva para solventar el tiempo que estarán esperando en el tráfico a la altura de Matilde, pues para ellos no es rentable estar en un estacionamiento enorme cuando pudieran estar circulando en otras vialidades.
Los vehículos siguen pasando, un solo carril es el que permite la circulación de los automóviles y sus desesperados conductores, se ven pasar uno tras otro, la gran mayoría únicamente con su conductor al volante sin pasajeros, algunos otros con la familia entera que busca salir de la ciudad para llegar a un destino fuera del estado, pero la problemática persiste, la falta de un programa de movilidad y transporte eficiente que permita que los habitantes de la Bella Airosa puedan trasladarse sin importar las intervenciones que deban realizar en las vialidades que atraviesan esta demarcación.