Hundimiento, basura y tráfico... la CdMx quiere volverse sustentable

Transporte eléctrico, nuevas energías y mejor manejo de los recursos son algunas de las iniciativas para mejorar la calidad de vida de los capitalinos.

Ángel de la Independencia en la Ciudad de México. (Omar Franco)
Paul Sandoval
Ciudad de México /

La Ciudad de México, con casi 9 millones de habitantes, enfrenta amenazas a su viabilidad, pero ya inició estrategias para resolver algunos de sus mayores problemas: su hundimiento, el manejo de 12 toneladas de basura diarias y el problemático traslado en calles poco aptas para garantizar el tránsito y que se encuentran casi permanentemente llenas de automóviles.

Las ciclovías, el transporte eléctrico, los jardines en unidades habitacionales, la cosecha de lluvia, el aprovechamiento de residuos, la generación de biodiésel y las celdas solares, son las estrategias impulsadas por el actual gobierno para encaminarse a resolver el desafío de volverse sustentable.

No es un secreto que la CdMx se hunde. “Cada año, la planicie lacustre de la Ciudad de México registra un hundimiento de entre ocho y 12 centímetros debido a la excesiva extracción de agua de los acuíferos, con efectos catastróficos para la infraestructura urbana”, señaló, Efraín Ovando Shelley, investigador del Instituto de Ingeniería de la UNAM, en un comunicado de la máxima casa de estudios.

Esto, dice, provoca la compactación del suelo fracturando tuberías y generando fugas de agua potable, mientras que al descender el nivel del agua queda un espacio de aire, conocida como nivel freático, que no podrá resistir el peso de la tierra y las construcciones.

En promedio, una familia integrada por cuatro personas, gasta diariamente unos mil 920 litros de agua, alrededor de 360 litros por persona, de acuerdo con el Sistema de Aguas de la Ciudad de México.

Cosecha de lluvia” es el programa que el gobierno capitalino, a través de la Sedema impulsa para mejorar el abasto de agua en colonias en las que habitan personas con recursos limitados; en él pretende reducir el flujo del agua a los drenajes con el que también se podrían evitar inundaciones, disminuir la cantidad de energía para bombear y transportar agua a las viviendas, proporcionar agua suficiente entre 5 y 8 meses, y finalmente contrarrestar el hundimiento del Valle de México por sobre explotación de los mantos acuíferos.

La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, presentó el “Programa Ambiental y de Cambio Climático para la Ciudad de México” que incluye la estrategia de cosecha de lluvia, movilidad, celdas solares y hasta generación de biodiésel con residuos de la Central de Abastos, utilizado como combustible de los autobuses de la RTP.

Desechos de la Central de Abasto, combustible para RTP

Pese a lo que algunos piensan, la basura ya no es un desperdicio, una forma de aprovechar un desecho que se genera de manera continua en los hogares es el aceite de cocina que puede ser convertido en combustible para autobuses, es decir, en biodiésel.

La planta de biodiésel inaugurada en julio pasado en la Central de Abasto por la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum y desarrollada en conjunto con el Instituto Politécnico Nacional (IPN), se dedica a producir combustible que es utilizado en los camiones RTP que circulan por la ciudad.

En entrevista para MILENIO, la doctora Violeta Mena Cervantes, técnica responsable del diseño, construcción y puesta en marcha de la planta de biodiésel por parte del IPN menciona que la principal ventaja ambiental de este bio-combustible “es que viene de un recurso renovable, no requiere agua en ningún proceso de su elaboración, y reutiliza el alcohol empleado en el proceso”.

En la Central de Abastos se habilitó este año una fábrica de biodiésel. (Especial)

De igual manera su impacto ambiental presenta una “reducción de hasta el 80 por ciento en la emisión monóxido de carbono, el gas de efecto invernadero más importante”.

Señaló que “México no produce ni un litro de diésel ultra bajo en azufre, todo lo importamos de Estados Unidos”. Y esto es cierto, de acuerdo con la publicación “La Bioenergía en México situación actual y perspectivas” indica que Estados Unidos es el líder en producción, seguido de Brasil, Indonesia, Alemania, Francia y Argentina.

También existen otros proyectos ambientales y de reciclaje en la Central de Abastos, así lo detalló en entrevista para MILENIO la coordinadora general, Marcela Villegas, “tenemos un biodigestor próximo iniciar pruebas, ICATE que es un centro de donación de alimentos para disminuir el desperdicio” y por último “el proyecto de las celdas fotovoltaicas para generar energía eléctrica a partir de luz solar” que se espera inicie el próximo año.

Central de Abasto da un paso para ser "ciudad solar"

El proyecto de las celdas solares en los tejados de la Central de Abasto complementa uno de los proyectos, el más ambicioso, de esta administración, el cual está a cargo de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) denominado “Ciudad Solar”.

Este programa, de acuerdo con el plan, tiene como objetivo implementar techos fotovoltaicos en los 300 edificios de gobierno que existen en la CdMx, el fomento de “la instalación de tecnologías de aprovechamiento de las fuentes renovables de energía” en pequeñas y medianas empresas para “abatir la emisión de gases de efecto invernadero asociada al consumo de la energía y contribuir a una descarbonización de la economía de la Ciudad de México”.

Celdas solares. (Rolando Riestra)

Para dar marcha a este proyecto, se instalaron 250 paneles solares sobre el edificio de la Sedeco ubicado sobre Av. Cuauhtémoc con la finalidad de sustituir la energía eléctrica por solar.

Con una inversión de 3 millones 500 mil pesos en la instalación de los paneles, se espera ahorrar 600 mil pesos de manera anual en el consumo energético de este edificio.

La "Ciudad Solar" tiene como objetivo para 2024 evitar la emisión de dos millones de toneladas de dióxido de carbono.

Ciclovías y transporte eléctrico masivo

Derivado de la pandemia de covid-19, la CdMx parece haber tomado un respiro de toda la contaminación producida por los autos que recorren la capital; también se implementaron algunas medidas para generar un cambio en la forma que sus residentes se transportan, ejemplo de esto son las ciclovías emergentes que a pesar de cubrir gran parte de la ciudad aún no son suficientes.

Eugenia es usuaria frecuente de las ciclovías, y señala que: “en México no existe una cultura vial de ningún tipo, ni si quiera el peatón sabe cómo conducirse para cruzar la calle”, también “hay gente que se mete al carril de bicicletas cuando trae carro, hace falta luz para visibilizar más al ciclista por las noches y más infraestructura de este tipo”.

La Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México (Semovi) señala que hasta el momento se cuentan con 88.43 kilómetros de esta infraestructura dedicada a las bicicletas, de los 600 que se tienen como meta para el 2024.

Trasladarse en ese vehículo es un gran aliado en la disminución de contaminantes en el aire que afecta principalmente a personas mayores de 60 años y niños. Un viaje de 10 kilómetros realizado en autobuses de transporte público emite medio kilo de contaminantes, en cada metro es de 0,24 kg, mientras que trasladarse en bicicleta es la manera más ecológica sin ninguna emisión de Co2, de acuerdo con la coordinación Universitaria para la Sustentabilidad de la UNAM.

Ampliación de ciclovías en la Ciudad de México. (Araceli López|Archivo)

También es necesario cambiar la forma en que la gente se traslada y la modernización del transporte de pasajeros. Ante esta premisa, la Semovi ha comenzado a cambiar las unidades de transporte que consumen combustibles contaminantes, adquiriendo 80 nuevos Trolebuses cuyo costo fue de siete millones de pesos cada uno y que corren sobre el eje central Lázaro Cárdenas.

Igualmente se adquirió una unidad eléctrica de Metrobús que va de Tenayuca a Etiopía y se espera que para diciembre de este año sean 10 camiones eléctricos los que circulen en la capital, con un costo de alrededor de 14 millones de pesos.

Todas estas acciones buscan disminuir la huella de carbono de la CdMx; sin embargo, se requiere de la participación ciudadana, políticas públicas, y más y mejor transporte para lograrlo.

Manejo de basura y reciclaje en tiempos de coronavirus

Otro problema que se ha visto acentuado por la pandemia es el aumento en la cantidad de basura que se produce y el regreso de los plásticos de un solo uso como cubrebocas, guantes y algunas caretas.

Noé Morales, recolector de basura, señala que “se le dio la indicación a la población, principalmente a los que han tenido cercanía con personas infectadas, que todos los accesorios utilizados para la atención de esas personas deben ir en una bolsa especial y nos la den sellada con cinta canela o con algún sello, pero no toda la población hace caso”.

De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema), para tener una idea de cuánta basura se genera en la CdMx, se manejan 12 mil 700 toneladas de residuos sólidos todos los días y “a través de actividades como el reciclaje, la realización de compostas, entre otras actividades, se espera que el aprovechamiento de residuos se incremente de 4 mil 100 a 10 mil 700 toneladas”.

Antonio Villar, separador de desechos sólidos en la planta de reciclaje de San Juan de Aragón, explicó que “la basura es separada por plástico, cartón, vidrio, hule, metal y hay lugares específicos donde se vuelve a seleccionar de nueva cuenta la basura, se empaca y es llevada a lugares de venta”.

Áreas verdes con jardines polinizadores

Una forma de contribuir a disminuir a la contaminación atmosférica sin salir de casa, es implementando “jardines polinizadores” en nuestros hogares, un programa impulsado por la Sedema de la mano de “Reto Verde”, ambos programas buscan contrarrestar el aumento de la temperatura y la desigualdad de las áreas verdes.

En el webinar “Jardines en la ciudad, ¿son ambientales?” especialistas coincidieron en que es momento de dejar de pensar en las plantas solo como las más bonitas, cuando la diversidad de especies que hay en la Cuenca de México es vasta y se puede hace jardinería desde la casa.

De junio de 2019 a septiembre de este año se han plantado alrededor de 12 millones 285 mil 798 árboles y plantas, lo cual representa el 81 por ciento de los 15 millones que se tienen como objetivo en la actual administración capitalina.

Si buscas adentrarte en la jardinería, la Sedema cuenta con una guía para crear tu jardín polinizador en tu casa, la cual puedes consultar en: http://data.sedema.cdmx.gob.mx/flippingbook/mujeres-polinizadoras/mobile/index.html#p=1


DMZ

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