Meseros de algunos restaurantes en la Ciudad de México han manifestado que la reapertura gradual para dar servicio a los comensales fue tardía por parte de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, pues durante el tiempo que no abrieron debido a la pandemia por covid-19 contrajeron deudas que tardarán “mucho tiempo en liquidarse”.
En entrevista con MILENIO, el mesero del restaurante de mariscos Villa Rica, Óscar Cornejo, sostuvo que la autorización se tuvo que dar meses antes, pues las repercusiones económicas son excesivas y el ingreso insuficiente.
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“Abrieron porque hicimos protesta social, contrajimos préstamos y deudas. La Jefa de Gobierno se tardo en reaccionar pues esto aumentará nuestros ingresos, pero no será suficiente para resolver nuestros problemas económicos”, dijo Cornejo.
Por su parte el mesero Gerardo Flores indicó que las pérdidas económicas fueron devastadoras pues había ingresos nulos para sustentas actividades elementales.
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“Fue devastadora, nos dejó muchas deudas. Hubo días que no se vendía comida, no había propinas y afectó nuestro bolsillo, teníamos que pagar luz, despensa, gas y sin ningún ingreso, era necesaria la deuda”, dijo Flores.
Por su parte, Juan Carlos Reynosa, mesero de la cafetería y librería El Péndulo manifestó que la decisión es gratificante pues permitirá generar el 60 por ciento más de ingresos, respecto a la nueva normalidad. Sin embargo “pudieron actuar desde un principio”.
“Esperamos recuperarnos en un 60 por ciento, poco a poco. Se tardaron a mucho en reabrir debió haber sido desde el principio. La recuperación no es fácil tenemos que tener esperanza y paciencia de que las cosas serán buenas”, explicó.
irh