Las exportaciones de Puebla que superan los 14 mil millones de dólares, de las cuales, 69 por ciento se destinan a Estados Unidos, se podrían ver afectadas por los cierres de Proméxico y de la Delegación de Economía del Gobierno Federal, medidas que reducen la posibilidad de que más firmas poblanas coloquen sus productos en el exterior.
En el punto anterior coincidieron los investigadores de la Facultad de Comercio y Estrategia Internacional de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), Juan Carlos Botello Osorio y Alfredo Ivánn Ferrer Toledo.
La centralización de las funciones de la Secretaría de Economía triplicó el tiempo de respuesta para realizar trámites para exportación; además, los representantes de las empresas deben trasladarse hasta la capital del país para cumplir con diferentes requisitos, fueron parte de los puntos expuestos por ambos académicos.
Durante la mesa de análisis “El T-MEC, los aranceles y Donald Trump, una encrucijada para México”, Botello Osorio explicó que la desaparición de ProMéxico impacta en las exportaciones porque las empresas poblanas pierden presencia en ferias y encuentros internacionales.
“ProMéxico tenía apoyos económicos para que las empresas participaran en ferias internacionales y ahora eso está detenido. Las empresas que quieran exportar tendrán que buscar otras maneras para poder promocionarse”, comentó.
Botello Osorio agregó que, con la desaparición de las Delegaciones de la Secretaría de Economía de la federación, se complicaron los procesos para exportación ya que tardan más tiempo documentos como los Certificados de Origen.
“Teníamos una delegación de la Secretaría de Economía que coadyubaba a todas las empresas con los Certificados de Origen y permisos previos. A partir del 1 de junio, estamos viendo cómo está respondiendo el nuevo esquema. Hay retrasos, no es la dinámica que veníamos trayendo. El tener un área que pudiera apoyar, facilitaba el comercio exterior. Ahora, el decidir trasladarse a México podría implicar cierto retraso”, manifestó.
Señaló que en el entorno de México se puede observar un estancamiento en la economía, pero también de las instituciones mexicanas para atender las demandas sociales y manejo del comercio hacia el extranjero.
“El gobierno mexicano debe ser un facilitador del comercio internacional y que no sea un ente que bloquee la agilidad que tiene el comercio hoy en día. Se requiere que haya más dinamismo por parte del gobierno federal, lo cual implica una mayor inversión para hacer más ágiles los trámites y dejar de lado el burocratismo que se está viendo actualmente”.
Por su parte, Alfredo Ivánn Ferrer Toledo, investigador de la Facultad de Comercio y Estrategia Internacional de la Upaep, comentó que el gobierno federal está centralizando los procesos de exportación, situación que causa retrasos en los permisos.
MITM