El gobierno estatal y el municipal de Puebla clausuraron, de manera coordinada, un rastro de carne que operaba en "absoluta ilegalidad" en la junta auxiliar de San Jerónimo Caleras, mismo que se comprobó que vertía todos los desechos al drenaje, indicó el gobernador Miguel Barbosa Huerta.
El mandatario criticó que los dueños del rastro actuaran con "tanta irresponsabilidad" pese a que es un sitio en el que se realizan sacrificios de animales sin las condiciones sanitarias adecuadas, por lo que advirtió la aplicación de las sanciones correspondientes contra los responsables.
Más tarde, el Ayuntamiento de Puebla indicó que el operativo de clausura fue ejecutado por petición del rastro municipal, el cual detectó que había descargas contaminantes al drenaje, por lo que solicitaron la intervención del Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Puebla (Soapap) y la Secretaría de Medio Ambiente municipal.
Fue así que "se ubicó un establecimiento adyacente al Rastro Municipal donde se realizaban prácticas fuera de la norma y sin los permisos correspondientes", por lo que elementos de Normatividad y Regulación Comercial, en conjunto con personal de Soapap, visitaron el establecimiento ubicado en la calle 110 Poniente sin número en la colonia Axoxotla 2.
La autoridad municipal sentenció que "al momento de la inspección, (el establecimiento) no presentó documentación de uso de suelo, licencia de funcionamiento, Protección Civil y Bomberos, por lo que se procedió a la clausura y colocación de sellos".
AFM