Operativos permanentes de Profepa en torno a la laguna del Carpintero demanda la Asociación de Abogados Ambientalistas de Tamaulipas para evitar que las personas se acerquen a puntos de riesgo por ataque de cocodrilos.
El organismo advierte que esta labor debe efectuarse por lo menos todo el verano, porque es cuando los saurios son más agresivos y la temporada en que familias de la zona y turistas acuden con más frecuencia al vaso lacustre.
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La coalición de abogados se ha pronunciado por aplicar multas y arrestos a las personas que se acerquen al hábitat de los cocodrilos. Su dirigente, Ricardo Alberto Cruz Haro, dijo que para ello, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente debe reforzar la vigilancia y efectuar operativos continuamente en el sector.
“Deben implementar vigilancia para alejar a la gente de esos puntos de peligro y si no atienden los exhortos a retirarse, aplicarles sanciones económicas y hasta arrestos, estamos en una temporada propicia para el ataque de los saurios y es cuando más gente se acerca, tanto familias de la zona como turistas”, planteó el activista.
La Asociación de Abogados Ambientalistas de Tamaulipas buscó al delegado de Profepa en el estado, sin embargo esa dependencia federal se mantiene acéfala desde hace tiempo, por lo que fue atendido por el encargado de despacho, Aquiles Chávez.
El funcionario le dio a conocer que será la Dirección General de Vida Silvestre en la Ciudad de México, a través de su área jurídica, quien decida el destino del animal que mató a una mujer en días pasados.
Cruz Haro refirió que la titular de esa dirección es María de los Ángeles Palma Irizarry, quien ya analiza toda la información del caso y deberá apegarse a la Ley General de Vida Silvestre.
“Este marco jurídico establece que es primordial respetar los hábitat y en este caso se invadió y sobrevino la tragedia por la presencia del animal, que después querían sacrificar pero no se trata de cobrar venganza”.
El abogado manifestó que el cocodrilo que atacó a la señora tendría que permanecer en su hábitat si se respeta la ley, pero apunta que la señalización de peligro es deficiente y la actitud de las personas a veces no ayuda, de ahí la importancia de las inspecciones de Profepa todo el verano, insiste.
CGCH